En el Senado

Casado pide rechazar "radicalismos y populismos" con miras a Castilla y León

El líder popular se reivindica como única opción de centro derecha y pide huir de los populismos a dos semanas de las elecciones autonómicas

Javier Maroto, Pablo Casado y Cuca Gamarra.

Javier Maroto, Pablo Casado y Cuca Gamarra. / EFE

Paloma Esteban

El PP arranca el nuevo periodo de sesiones (esta semana vuelven los plenos en el Congreso y el Senado) con una reunión de los dos grupos parlamentarios en la Cámara Alta y la dirección nacional que Pablo Casado presidió con todos sus diputados y senadores para marcar las líneas políticas del nuevo año político. Y quedó claro, una vez más, que los acuerdos entre los dos grandes partidos, PP y PSOE, son prácticamente imposibles. El líder popular confirmó a sus filas que seguirán en la ofensiva contra el reparto de fondos europeos (“lealtad con España es haber avisado al Gobierno que cometería un error si creaba una red de amigos”) y lanzó durísimos ataques contra PSOE y Unidas Podemos “por el deterioro institucional que han generado”.

Y, sobre todo, aprovechó para enviar un mensaje político en un momento clave: en mitad de la campaña electoral de Castilla y León y a dos semanas de unas elecciones que para el PP son cruciales. “Somos el único partido reformista y de centro derecha. La única alternativa a los populismos. Os pido que rechacemos cualquier proyecto de radicalización y populismo”, dijo a los suyos en pleno debate sobre si los populares deberán apoyarse en Vox para gobernar en esa comunidad tras el 13 de febrero. 

Evitando una mayor concreción y culpando a “los espacios de libertad que se han ido cerrando por el precio que tiene que pagar el partido de Sánchez” con sus pactos, Casado pidió “volver a reabrir esos espacios de libertad” en “las horas más oscuras que vive la nación española por culpa de la fractura entre ciudadanos y la división territorial”. Y, ante esos retos y el panorama que dibujó, Casado afirmó que “para esto está el PP”. “Vamos a proponer un proyecto común con el plan que validastéis en la última convención nacional”, zanjó. Las palabras de un único proyecto firme y de referencia en el centro derecha también llegan tras días de polémica por las declaraciones de José María Aznar en la campaña castellanoleonesa. El expridente afirmó el sábado en Valladolid que el PP tenía que ser la única referencia reconocible para los votantes.

Nuestro plan es desfibrilar a un país que ha sufrido demasiado con este gobierno sectario. Tenemos que volver a poner en marcha los motores, involucrar a toda una generación, aplicar políticas con las que se sientan identificados. Que no haya votos basados en el miedo. Queremos los votos de los que quieran convivir, de los valientes que no se resignan”, afirmó el jefe de la oposición a los suyos.