En junio del 2017 un zaragozano resultó gravemente herido, tras ser apuñalado por dos hombres en un parque de la avenida Cataluña de la capital aragonesa. Llevó a suspenderse el juicio porque la víctima no acudió por miedo, según un amigo suyo, y ahora la Audiencia Provincial de Zaragoza acaba de condenar a los dos autores. Los magistrados de la Sección Tercera han impuesto cinco años de prisión para Vicente Fontecha y dos años y medio para su padre, que responde al mismo nombre.

Considera el tribunal provincial que Vicente Fontecha hijo se encontró por la calle con la víctima y un amigo suyo, comenzando una discusión. En un momento dado, según los hechos probados de la sentencia, uno de los jóvenes que participaban en la pelea cogió una palanqueta que se encontraba en el interior del vehículo, mientras Fontecha llevaba en una mano una sierra de arco metálica y en la otra un cuchillo de unos 20 centímetros de longitud.

En el lugar de los hechos se arremolinaron diversas personas, entre ellas el padre de Vicente, quien gritó: «Mátalo, Mátalo», al mismo tiempo que le acercó a su hijo el cuchillo que se había caído al suelo durante la rifirrafe anterior.

En un momento determinado Vicente Fontecha cogió el cuchillo, y con ánimo de causar la muerte a uno de los jóvenes, le acometió con dicho cuchillo primero en el pie y después en la espalda, causándole una herida penetrante en el hemotórax que afectó al lóbulo inferior del pulmón izquierdo y que, de no haber sido por el tratamiento médico inmediato recibido, le hubiera causado la muerte por colapso pulmonar o shock hipovolémico. Un vecino logró quitar de la mano el arma blanca impidiendo que continuara acometiendo a su víctima, consiguiendo huir del lugar.

TENTATIVA

Los magistrados califican el caso como un delito de homicidio en grado de tentativa porque «el procesado Vicente Fontecha acuchilló por la espalda a la víctima que de no haber sido por el tratamiento médico inmediato recibido hubiera fallecido» el hombre. «En este caso nos encontramos ante un claro dolo directo de causar la muerte pues la conducta del procesado hacia su oponente es agresiva y dirigida a un lugar que inequívocamente puede causarle la muerte», destacan en la sentencia.

Para llegar a dicha conclusión se apoyan en las declaraciones de los testigos y de la Policía Nacional. Resaltan especialmente que el autor de los hechos se fugó a Teruel «donde lo detuvieron con las zapatillas llenas de sangre». En ese momento no declaró su inocencia. Un informe de ADN realizado por la Brigada de Policía Científica señaló que esas manchas correspondían a la víctima. Vicente Fontecha hijo se enfrentaba también a un delito de lesiones que solicitaba la abogada Ana Herrando por las heridas del amigo de la víctima, si bien ha sido exonerado por el tribunal provincial. La sentencia no es firme y puede ser recurrida tanto por los abogados de las defensas, el ministerio público como por la acusación.