El truco definitivo para ahorrar dinero con la calefacción

Revisar el correcto funcionamiento de los radiadores es importante para evitar bolsas de aire

Aunque el invierno ha tardado en llegar, el frío ya se ha instalado en la mayoría de España. Ante esta situación, los radiadores y calefactores son grandes aliados para combatir las gélidas temperaturas. Sobre todo en las zonas donde las máximas no superan los cero grados y donde la nieve se está acumulando.

Revisar que nuestros aparatos funcionen correctamente es fundamental para evitar un derroche energético que podría verse reflejado en la factura a final de mes. Esto sucede porque la acumulación de aire sobrante en los conductos de los aparatos hace que la emisión de calor no sea homogénea, lo que provoca una pérdida de energía considerable.

Así funciona el purgado de los radiadores

Purgar un radiador es una tarea muy importante, ya que ayudará a reducir las burbujas de aire que podrían afectar gravemente a los aparatos. En la actualidad, hay radiadores que realizan este proceso de forma automática. Sin embargo, los antiguos necesitan ser purgados de forma manual. Por ello, cuando llega el frío, es necesario revisar si estos funcionan correctamente.

Una vez se haya comprobado su buen estado, el siguiente paso será purgarlos. Para ello, habrá que apagar la calefacción y esperar a que el radiador esté frío. El aire sobrante se acumulará en la parte alta del radiador. Una de las recomendaciones que lanzan los expertos es que se comience con el radiador más próximo a la caldera, siguiendo así su flujo natural del agua.

Antes de continuar deberás buscar un recipiente que colocar debajo de la llave para que caiga el agua del purgado. Tras abrir el radiador, verás como sale tanto el agua como el aire. Y cuidado, porque probablemente el olor no sea el más agradable debido al tiempo que lleva el agua dentro.

El truco para saber cuándo ha salido todo el aire es muy sencillo. Deberás fijarte en el agua y si sale un chorro fluido y uniforme significará que ya se ha desprendido de todo el aire. Una vez hayas acabado con un radiador, deberás seguir con el resto repitiendo el mismo proceso.

¿Todavía sigue sin funcionar adecuadamente tu radiador? Puede que haya un error general que este afectando a todo el sistema o que simplemente tengas que llamar a un especialista que te ayude con las partes más técnicas de la reparación.