Adiós a las cucharillas para el café: el nuevo invento que lucha contra el desperdicio

Una empresa formada por dos jóvenes han creado cubiertos comestibles para dejar de crear residuos

Una taza de café con la cucharilla dentro

Una taza de café con la cucharilla dentro / PIXABAY

Hay cosas en los bares y restaurantes que llevan toda la vida, pero están a punto de cambiar. Hace varias semanas salió a la luz que la Unión Europea quiere limitar el uso de plásticos por lo que, por ejemplo, los sobres de plástico de azúcar o kétchup que se usan diariamente en establecimientos hosteleros desaparecerán para siempre. Cuando hay un cambio de rumbo tan importante, renace el espíritu emprendedor de algún joven con una mente brillante con ganas de encontra runa solución al problema.

Con el ajetreo del día a día, muchas personas han dejado de tomar su café diario sentados en la barra del bar y lo piden para llevar. Esto provoca que los establecimientos tengan disponibles también envases, la gran mayoría hechos de materiales reciclados, para que los clientes se puedan tomar el café en la oficina mientras trabajan.

Después de tomar la bebida que da energía para soportar la rutina, la gente tira todo a la basura: el vaso, el sobre del azúcar y la cucharilla. Habitualmente, la cucharilla, que se podría reutilizar para el próximo día con un simple lavado bajo el grifo, es de plástico o de una especie de madera. Sea cual sea el material, no se reutiliza y acaba como tantas cosas en la basura.

Un grupo de jóvenes ha tenido una buena idea para reducir los residuos generados con el café inventando una cucharilla que se puede comer. La marca Plash vende cubiertos comestibles. "Es como una galleta de acompañamiento, pero que sustituye al palito de madera. No se deshace con el café, se ablanda, coge textura de galleta, tiene sabor a vainilla y todo el mundo la puede tomar porque es vegana y sin gluten", explica José, confundador de la marca en un vídeo en Instagram que se ha hecho completamente viral.

Estos palitos comestibles están hechos a base de arroz, exactamente compuestos de una mezcla de harina sin gluten con el equilibrio entre funcionalidad y alimento. La idea nació después de un viaje de los dos jóvenes a Costa Rica, donde visitaron varias plantas cafeteras y cuando volvieron a España intentaron aplicar todo el conocimiento aprendido.