Pocos días le ha durado la tranquilidad al alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón. Vox ha anunciado que no apoyará los presupuestos de 2022, una amenaza que se produce tan solo cinco días después de firmar un acuerdo con PP y Cs para sacar adelante las cuentas del próximo año. Y cuatro desde que el Gobierno de PP y Cs aprobara el proyecto de las cuentas, que ahora tiene pasar todo el trámite administrativo para entrar en vigor el 15 de febrero.

El mensaje de Vox ha sorprendido en la planta noble ya que el pasado jueves (29 de diciembre) firmó un acuerdo con PP y Cs que recogía la mayoría de sus exigencias. De hecho, fue el propio portavoz de la ultraderecha, Julio Calvo, el encargado de anunciar el pacto con Azcón, que solo apareció para hacerse la foto, como también hizo la vicealcaldesa, Sara Fernández.

No es la primera vez que el partido de Abascal amenaza con bloquear las cuentas. El 10 de diciembre Calvo lanzó esta misma advertencia después de conocer que la ejecución a 31 de noviembre era del 42%. Entonces decía que los presupuestos «no servían para nada» porque «luego no se gasta ni un euro». El 29 de diciembre firmó el acuerdo.

Apoyos clave

Calvo ha comenzado el año anunciando que daba por roto el acuerdo porque el proyecto de presupuestos aprobado no recoge ninguna de las propuestas que pactó con el alcalde y la concejala de Hacienda, María Navarro, que se ha encargado de dirigir las negociaciones.

Según el edil, el borrador de las cuentas, que ascienden hasta los 837 millones, «no incorpora ni una sola de las partidas y los acuerdos pactados en las mesas de negociación» celebradas el 20 y 21 de diciembre por una sencilla razón, porque el proyecto de presupuestos aprobado y publicado está fechado en el día el 17 de diciembre. «Trabajamos sobre ese borrador, pero lo han aprobado sin las modificaciones pactadas», ha criticado el portavoz, que ha asegurado que «en estas condiciones no podemos aprobar las cuentas y damos por roto el acuerdo del 29 de diciembre».

Desde el Gobierno de PP-Cs dicen que se «cumplirá íntegramente» el acuerdo suscrito y que los proyectos exigidos por la ultraderecha que se incluirán durante la tramitación del presupuesto del 2022, es decir, a través de las enmiendas que presenta cada grupo.

Vía enmiendas

Pero esto tiene un riesgo porque la normativa es muy exigente y solo se pueden mover cantidades económicas de un mismo capítulo. Por este motivo, Calvo ha explicado que este año habían exigido negociar antes de que el Gobierno local aprobase el proyecto, en lugar de en la fase de enmiendas como había sucedido hasta este año.

De esta manera, explica, iban a tener garantías de que sus proyectos aparecieran reflejados. Al hacerlo vía enmiendas se arriesgan a que técnica y jurídicamente no puedan incluirse, que es lo que va a pasar ahora, admitió Calvo.

María Navarro asegura que han estudiado y analizado todas las propuestas de Vox aceptadas en el acuerdo y que se ha constatado que se podrán incluirse en el presupuesto vía enmienda. «Ha habido un error en la interpretación y todos los acuerdos se incorporarán en la tramitación», insistía la concejala, que ha explicado que era «imposible» incluir las peticiones de la ultraderecha de un día para otro. Hay que tener en cuenta que PP y Cs sellaron su acuerdo la tarde el 29 de diciembre y el Gobierno local aprobó el proyecto presupuestario al día siguiente y por la mañana.

La inversión ejecutada en 2021 ha sido del 56%

Los grupos de la oposición, PSOE y Podemos, han cuestionado la capacidad del alcalde, Jorge Azcón, y su equipo de Gobierno para ejecutar el presupuesto más inversor de la historia, como lo definió la concejala de Hacienda, María Navarro, durante la presentación de las cuentas de 2022. Ascenderán a 837 millones, de los que 79 serán para inversión. Según la portavoz del PSOE, Lola Ranera, «da igual que sean 79 que 79.000 millones si luego ejecutan lo que ejecutan».

En concreto, un 59% de la inversión de 2021, según el portavoz de Podemos, Fernando Rivarés. El concejal ha informado que a 30 de diciembre, PP y Cs habían utilizado el 89,14% del presupuesto total y «un triste y ridículo 56%» de los Capítulos VI y VII. «Esta es la razón por la que no confiamos en Azcón», ha recalcado Rivarés.

Por ello, ha insistido una vez más en la idea de que el proyecto de presupuestos de 2022 «es mentira» dado que «con total seguridad, el 90% de las partidas no se ejecutarán», ha aventurado Rivarés, que ha criticado que muchos de los planes que se reflejan en el borrador de las cuentas se recuperan de 2020 y 2021.

Desde el PSOE denunciaron que se han abandonado proyectos como la reforma de Giesa o la mejora del Canal.

 «Tomadura de pelo»

Para Calvo, la maniobra de Azcón es «una tomadura de pelo», por lo que ha anunciado que a día de hoy no votarán las cuentas. «Les hemos exigido que se autoenmienden y una vez que lo hayan hecho nos sentaremos a hablar y veremos las dificultades que hay para que prosperen nuestras exigencias».

Según Calvo, hay tres escenarios posibles para explicar lo que ha sucedido, «que haya sido un error, un malentendido por las dos partes o que nos han intentando engañar». Y según ha explicado, «ocho de las 13 exigencias» aceptadas no aparecen en las cuentas y en otras cinco no se refleja el incremento acordado.

Las exigencias

En concreto, el presupuesto no incluye partida alguna para crear una red de aparcamientos compensatorios y disuasorios en los barrios; o para instalar nuevas cámaras de vigilancia en los barrios.

Tampoco para crear una nueva línea de ayuda, seguros o avales destinadas al alquiler de viviendas para jóvenes o para iniciar el estudio para mejorar las conexiones aéreas del aeropuerto.

En el presupuesto no hay dinero para ejecutar el plan extra de arbolado en los barrios; para crear una oficina del inversor; ni una ventanilla única empresarial. Calvo denunció que tampoco hay dinero para el estudio de la simplificación normativa municipal o para la creación de la aplicación móvil El Ayuntamiento en tu bolsillo.

La oposición

Desde la oposición, PSOE y Podemos no han tardado en aprovechar esta nueva jugada de la ultraderecha para desaprobar a Jorge Azcón como alcalde. «Estamos absolutamente desconcertados», ha asegurado la portavoz del PSOE, Lola Ranera, para quien «el lío de la derecha que tienen organizado es de un calado incomparable».

Fernando Rivarés tampoco daba crédito a lo sucedido. «¿Se han reído otra vez en la cara de Vox? ¿Nos han mentido a todo? ¿O han metido la gamba de una forma inaceptable?», cuestionaba el concejal de Podemos.