REUNIÓN CON LA RFEF

Zaragoza sabrá si es sede del Mundial antes de iniciar las obras de La Romareda

La FIFA fijará los requisitos en junio y la Federación prevé comunicar su decisión en septiembre. El consistorio quiere licitar la nueva Romareda entre «abril y mayo» e iniciar las obras a finales de año

Sanllehí, Fle, Serrano y Marín, este miércoles en la reunión con la RFEF en Las Rozas.

Sanllehí, Fle, Serrano y Marín, este miércoles en la reunión con la RFEF en Las Rozas. / AYUNTAMIENTO DE ZARAGOZA

Habrá que esperar más de medio año para saber si Zaragoza es una de las sedes del Mundial de Fútbol 2030. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) no informará sobre las ciudades elegidas hasta finales de año, previsiblemente hasta el mes de septiembre, cuando ya podrían estar adjudicadas (o a punto) las obras de la nueva Romareda.

El Gobierno de PP-Cs tiene previsto licitar los trabajos entre abril y mayo para poder iniciar la construcción del campo a finales de año, que se prolongará durante cuatro años y cuyo coste, que asumirá el Real Zaragoza, se disparará hasta los 140 millones de euros. Lo hará antes de que la FIFA comunique en junio los requisitos que deben cumplir las ciudades para optar a ser una de las sedes. 

La Federación ha convocado este martes en Las Rozas (Madrid) a todas las ciudades que aspiran a formar parte de la candidatura de España, Portugal y Ucrania para la celebración del Mundial de Fútbol de 2030, entre ellas Zaragoza. De las 15 que quieren albergar alguno de los partidos en España, solo quedarán once (Portugal tendría 3 y Ucrania 1). No obstante, algunas ciudades y estadios candidatas podrían caerse de la lista al no poder cumplir con los estándares mínimos definitivos.

Tras el encuentro, el concejal de Urbanismo e interlocutor entre la RFEF y la ciudad, Víctor Serrano, ha asegurado que las sensaciones son buenas y afirmó que «Zaragoza sigue en la carrera». «Hemos hecho los deberes», ha subrayado en referencia a la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que va a permitir que el nuevo estadio amplíe su capacidad y cumpla con todos los «parámetros legales desde el punto de vista urbanístico». Una modificación que, además, incluye la condición impuesta por el Zaragoza para asumir la inversión, que es poder explotar el estadio durante 75 años, los que dice que necesita para amortizar los 140 millones que aportará. 

Esta alegación -- que tras el periodo de exposición pública, tendrá que ratificarse-- solo fue aceptada en el pleno por el PP, Cs y Vox (que suman mayoría) y contó con los votos en contra de PSOE, ZeC y Podemos. Esta falta de consenso y el retraso que acumula la FIFA en el proceso de selección --de unos seis meses-- puede poner en peligro el proyecto, calificado de «pelotazo» por la candidata socialista a la Alcaldía, Lola Ranera, que rechaza el plan Romareda de Jorge Azcón. La socialista no ha confirmado si paralizaría la adjudicación en caso de ser la próxima alcaldesa. También podría pasar todo lo contrario, que favorezca el entendimiento entre el ayuntamiento y el Gobierno de Aragón, sin la presión del periodo electoral. 

La licitación de la nueva Romareda se hará en primavera

El concejal de Urbanismo quiere sacar a licitación la redacción del proyecto del nuevo estadio, su construcción y explotación antes de la cita electoral, «entre abril y mayo». Lo hará antes de que se conozcan los requisitos definitivos exigidos por la FIFA para el Mundial, que se anunciarán finalmente en el mes de junio, y que no variarán sustancialmente de los del Mundial de 2026.

A partir de entonces, las ciudades deberán presentar sus proyectos y será la RFEF la que haga la criba. En principio debería hacer pública su elección tras el periodo estival, en el mes de septiembre y tras su visita a todas las ciudades candidatas, aunque no ha fijado una fecha concreta en el calendario. La candidatura ibérica no se presentará hasta abril de 2024.

Serrano ha explicado que por ahora el ayuntamiento cumple con una de las primeras exigencias de la RFEF al «garantizar que el emplazamiento es apto legalmente con la modificación del planeamiento» que prevén aprobar de forma definitiva el próximo mes. También tiene garantizada la inversión ya que el Real Zaragoza, que deberá presentarse al concurso público, ha dicho que construirá el campo a cambio de explotarlo durante 70 años. Serrano explicó que la capital «cumple» con los plazos y confirmó que las obras comenzará a finales de este mismo año. De lo contrario, admitió, sería difícil llegar a tiempo y tener el estadio cuatro estrellas listo un año antes del mundial, cuando la FIFA quiere disponer de los campos de fútbol.

La Ciudad del Deporte

Este organismo también exige una Ciudad del Deporte, que se ubicaría, en principio, en el Parking Norte (si se alcanza un pacto con la DGA, propietaria de los suelos) e incluiría al menos dos campos de fútbol y un hotel o residencia para los equipos que vinieran a jugar a Zaragoza durante la competición mundialista. 

Al encuentro también asistió el director general del Real Zaragoza, Raúl Sanllehí, el presidente de la Federación Aragonesa de Fútbol, Óscar Fle, y el jefe de servicio de Actividad Deportiva y Competición del Gobierno de Aragón, Miguel Ángel Marín. Desde el Real Zaragoza, a través de un comunicado, afirman que hay tiempo para preparar a la ciudad y que consigue su objetivo, ser una de las sedes del Mundial.

Los requisitos

Cada una de las sedes candidatas está formada por un estadio en el que se jugarán partidos del Mundial y todos los equipamientos anexos necesarios. En el caso de Zaragoza, solo hay un estadio, por lo que la candidata y la sede es la ciudad como tal. En el caso de Madrid o Barcelona, hay dos sedes por ciudad: el Bernabéu y el Wanda Metropolitano y el Camp Nou y el Cornellá-El Prat, respectivamente.

Cada una de las sedes debe ofrecer, además del estadio, un campo de entrenamiento y dos centros oficiales de entrenamiento más. Los campos de entrenamiento deben estar cerca de los estadios, a máximo 20 minutos, y deben ser uno o dos campo de fútbol donde entrenarán los equipos antes de los partidos.

Los centros oficiales de entrenamiento, de los que debe haber 72 entre España, Portugal y Ucrania, son los espacios donde las selecciones se concentran, viven y entrenan. Se desplazan desde allí a los estadios, es decir, a las sedes, juegan y después regresan. Deben estar, como máximo, a 100 kilómetros de la sede.

Además, las sedes deben contar con un hotel de cuatro estrellas como mínimo, que será de uso exclusivo para la selección que acoja, con 60 habitaciones individuales y salas. A menos de 20 minutos en coche del hotel debe haber dos campos de fútbol para entrenar.

Además, estos campos deberán tener vestuarios, sala para fitness, salas de masaje, salas médicas, aparcamiento, espacio para la prensa, gradas, iluminación, WiFi y estar conectado con transporte. También debe garantizarse que los equipos pueden entrenar y ensayar estrategias sin ser vistos desde cerros o edificios altos.

Todas estas garantías deben estar por escrito, firmadas, y con todas las autorizaciones y licencias concedidas. En caso de que no se hayan construido las instalaciones, debe existir un compromiso desde el punto de vista urbanístico de que es viable la edificación de todos los equipamientos necesarios.