Elecciones de mayo

El PSOE fuerza un pleno para refrendar el pacto antitransfuguismo tras la fuga de los concejales de Cs en Zaragoza

Los socialistas piden a Azcón que no cuente con los exconcejales de Cs. ZeC opina que Fernández no podría formar parte de la Junta de Portavoces

La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Zaragoza, Lola Ranera, en un acto de campaña.

La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Zaragoza, Lola Ranera, en un acto de campaña. / Jaime Galindo.

La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Zaragoza –y candidata a la Alcaldía con esta misma formación–, Lola Ranera, anunció este jueves que ha solicitado la celebración de un pleno extraordinario en el que pedirán al resto de partidos que se signifiquen sobre el cumplimiento del pacto antitransfuguismo después de que los seis exconcejales de Cs hayan abandonado su formación sin dejar el acta y sin dejar de formar parte del equipo de Gobierno municipal que lidera Jorge Azcón.

La solicitud pide al pleno que «refrendar su compromiso» con el pacto, concretamente con la adenda II, que establece que el compromiso de todas las formaciones políticas «a impedir la utilización de tránsfugas para constituir, mantener activamente o cambiar las mayorías de Gobierno de las instituciones públicas».

El pleno debe convocarse en los próximos 15 días, si bien la solicitud del mismo no sentó bien en el PP, que recordó que los portavoces de todas las formaciones acordaron por escrito que en abril, mes previo a las elecciones, solo se celebraría una sesión plenaria.

En este sentido, Ranera considera que los seis exediles de Cs son tránsfugas y que Azcón no debería de contar con ellos en su Gobierno ni tampoco incorporarlos en listas, como va a ocurrir. «Este país y esta ciudad necesita partidos en el centro. El PSOE siempre ha tenido la capacidad de negociar hacia el centro y hacia su izquierda porque eso es bueno para la democracia. Pero Azcón ha fagocitado el centro y ahora está abocado a pactar con la ultraderecha», criticó Ranera, que por otro lado confirmó que el concejal Ignacio Magaña, condenado recientemente por conducir sin carnet, seguirá siendo parte del PSOE municipal. «Ha pagado. Hay que ser empáticos con él», expresó.

El pacto considera tránsfuga a los representantes que, «apartándose individualmente o en grupo del criterio fijado por los órganos competentes de las formaciones políticas que los han presentado», Cs en este caso, «pactan con otras fuerzas» para «mantener la mayoría gobernante en una entidad local», entre otras variables. Sin embargo, el exconcejal de Cs y responsable de Urbanismo, Víctor Serrano, que compartirá lista con la conservadora Natalia Chueca, negó también este jueves que los seis exediles de la formación naranja sean tránsfugas porque porque su decisión no cambia, «en ningún caso», las mayorías. Además, recordó, «como independiente llegué y como independiente me voy», aunque, eso sí, no mencionó que ha estado afiliado a Cs.

"Acto de responsabilidad"

Asimismo, Serrano aseguró que la decisión de continuar en el equipo de Azcón hasta las elecciones de mayo es una muestra de «responsabilidad» con la ciudad para «sostener un Gobierno legítimo» y «en contra de sus intereses personales», dado que al pasar a ser concejales no adscritos pierden un 20% de sus salarios.

Mientras, siguen se mantienen algunas incógnitas tras la disolución del grupo municipal de Cs. En los plenos de las juntas de distrito, por ejemplo, hay vocales nombrados por el partido naranja que ahora no tendrían derecho a participar.

Sobre los trabajadores, solo había dos contratados por el grupo municipal como autónomos, y hace semanas que ya no trabajan para Cs. El resto dependen del consistorio o del Gobierno y, si así lo decide la junta de portavoces, se les cesará antes de las elecciones. No obstante, este jueves no hubo acuerdo sobre cuándo celebrar esa junta de portavoces.

Con respecto a la asignación que recibía hasta ahora el grupo municipal de Cs, será el consistorio el que se haga cargo y deje de aportar las cantidades pendientes. Hace dos semanas, se encargó una auditoría externa para liquidar las cuentas del grupo. 

Santisteve: "Azcón ha jugado a minar el partido"

Antes de la comparecencia de Ranera en la que ha dado a conocer la solicitud del pleno extraordinario, el portavoz de ZeC en el Ayuntamiento de Zaragoza, Pedro Santisteve, también había dado su opinión sobre lo ocurrido con los exconcejales de Cs. El exalcalde cargó contra Azcón ya afirmó que se trata de "una operación calculada de transfuguismo".

En rueda de prensa, Santisteve calificó este asunto como "la bomba" de todas las actuaciones de este mandato porque todo el grupo municipal de Cs desaparece e implica "la devolución del dinero recibido los remanentes no gastados e interrumpir el flujo de dinero municipal a este grupo". "Ha sido casi un año de tiras y aflojas y el alcalde, Jorge Azcón, ha jugado a minar el partido". Esta decisión la posponen al momento de menor coste político, casi en plena campaña electoral, ha observado, y "lo venden como un favor a la institución por lo que es un acto de hipocresía mayúscula porque se usa la institución en propio provecho personal y partidista".

Ha criticado que los que decían que venían a regenerar la política traslucen un comportamiento de "aspirar a agarrarse al sillón y no cumplir la palabra dada, lo que supone un descrédito de la política de la derecha de España".

Desde Podemos, su portavoz, Fernando Rivarés, se limitó a decir que "la gente quiere que dediquemos nuestro tiempo a resolver sus problemas reales: el precio de los alimentos, de las hipotecas, lo mal que funciona el autobús o la inseguridad en los barrios. No voy a perder un minuto en hablar de los líos de la derecha mientras todo se ajuste a lo legal”.

Vox pone en duda para quién trabajaban los concejales de Cs

Por su parte, desde Vox, el portavoz de esta formación, Julio Calvo, opinó que no sabe "en qué medida los concejales de Cs seguían en el Ayuntamiento de Zaragoza las directrices de su partido o, por el contrario, cumplían las órdenes del alcalde y por lo tanto seguían las políticas del PP". "En cualquier caso el mantenimiento de las actas de concejales va a alterar poco el funcionamiento del ayuntamiento y mucho menos la gestión administrativa. Otra cosa hubiera sido si ese abandono del partido se hubiera producido a mitad de legislatura", añadió.