El Real Zaragoza viajó ayer a Boltaña con una expedición de 26 futbolistas para iniciar la concentración que le tendrá trabajando en el Pirineo hasta el próximo día 26. Luis Milla dirigió la primera sesión a las 19.00 horas por espacio de hora y media en la que la única incidencia fue que Ángel tuvo que retirarse por un pequeño golpe que no revistió importancia. Bajo un fuerte calor, el técnico turolense exigió máxima intensidad a los futbolistas en un entrenamiento que estuvo marcado también por el contacto continuo con el balón. Milla dispuso diferentes ejercicios de posición en espacios cada vez más amplios, un ensayo de la presión y, al final, una parte de trabajo con finalizaciones y partidillos. La sesión contó con la presencia de un buen número de aficionados zaragocistas. El equipo tendrá hoy ya doble sesión de trabajo, la primera a las 9.30 horas y la segunda ya por la tarde a las 19.00 horas.