El Córdoba no logró el fichaje de José Manuel Fernández, que está cedido en el Oviedo por el Zaragoza en una operación en la que el club andaluz estuvo trabajando en los últimos días. El Oviedo estaba dispuesto a renunciar a la opción de compra que tenía en junio para que el jugador pasara a ser propiedad del Córdoba. Según algunas fuentes, el Zaragoza, que paga la mitad de la ficha del futbolista, que es de un total de 300.000 euros, fue al final el obstáculo para que la operación se concretara sobre la bocina del mercado de fichajes.

Mientras Fernández, que fichó por el Zaragoza en el 2013, se mantiene en el Oviedo, sin minutos, el equipo aragonés presentó ayer a otro lateral derecho, Joan Campins, que ya había debutado en el choque ante el Almería y que llega al equipo por las lesiones de Bertrán e Isaac.

"Vine de una forma precipitada, pero las sensaciones de grupo son muy buenas. Hay un buen grupo, los capitanes tiran mucho y se pueden hacer muchas cosas", aseguró el lateral mallorquín, que arribó a La Masia en el 2013 y que sale cedido por el filial del Barca, donde este curso en Segunda B ha jugado 8 partidos: "Mi intención primera es ayudar lo máximo para que el Zaragoza esté arriba, que es donde debe estar. Ya veremos qué pasa más adelante, pero ahora hay que sumar y sumar".

Quiso mandar Joan Campins un mensaje de optimismo. "En el grupo hay gente de mucho peso, que hace que esto tire para arriba y sin duda este sábado empezará a girar la cosa", aseveró un jugador castigado por las lesiones en los últimos años, sobre todo en su primera temporada en Can Barça. "No queda otra que dejar de lado el pasado y mirar el presente", dijo.