Haré un PHN que una a los españoles y que respete a Aragón" . Fue el compromiso rotundo que José Luis Rodríguez Zapatero adquirió anoche en Zaragoza ante más de 10.000 entusiastas militantes y simpatizantes --12.000 según los organizadores-- que llenaron la plaza de toros de La Misericordia. El líder del PSOE se comprometió igualmente a "respetar y apoyar a Aragón" si logra gobernar en España en el 2004. Y subrayó con voz seria y tajante en medio de los aplausos: "Teruel va a existir y va a contar".

El PSOE de Aragón vivió ayer su acto central de la campaña electoral en un ambiente de clara euforia, radicalmente distinto al pesimismo de anteriores citas electorales.

Las recientes encuestas que pronostican un triunfo del PSOE en las principales instituciones de la comunidad y, especialmente, en la DGA, donde Marcelino Iglesias puede ser el primer presidente que repita mandato en la historia de la comunidad, contribuyeron de forma decisiva a animar el día grande de los socialistas aragoneses.

Y es que el acto de la capital aragonesa fue uno de los más multitudinarios de los protagonizados por el líder nacional del PSOE en esta campaña. En su intervención Zapatero, al igual que Iglesias y el alcaldable Juan Alberto Belloch, no obvió la polémica del PHN como tampoco la del fiasco del AVE. En política hidráulica, dejó claro su intención de gobernar "para unir y no para enfrentar a unas comunidades, que es lo que ha hecho el PP con el PHN". En medio de constantes aclamaciones de "presidente, presidente" , Zapatero ironizó al referirse a la estación del AVE de Zaragoza: "El sábado fui a Sevilla en el AVE que hicimos los socialistas; hoy (por ayer) no he podido venir en AVE por la incompetencia y el sectarismo del PP".

En un discurso de media hora, interrumpido en reiteradas ocasiones por un público enfervorizado, Zapatero se refirió a Iglesias como "un ejemplo de moderación y de defensa de su tierra". También habló de política nacional y de la guerra de Irak. Y dejó claro que una victoria del PP en las elecciones del próximo domingo permitiría a José María Aznar embarcarse "en nuevas aventuras peligrosas" con el presidente de Estados Unidos, George Bush, así como incrementar su política antisocial y de desprecio a los españoles. "No se merece aprobar la reválida, sino recibir un mensaje de alternancia democrática, de renovación de la democracia y de gobernantes en interés de la mayoría", puntualizó.

BELLOCH, LANZADO Juan Alberto Belloch abrió el mitin con una intervención en la que cargó contra su rival en las urnas, el popular José Atarés, al que acusó de "esconderse y agachar la cabeza" en las manifestaciones contra el trasvase del Ebro y contra la guerra de Irak. Según afirmó, Atarés "padece el síndrome de ser manso y también el de las inauguraciones frustradas", en alusión a la apertura de la estación del AVE. "Es una estación a la que no llegan trenes y eso no hay dios que lo entienda. Es un insulto a la inteligencia".

También subrayó que Atarés es "especialista en la especulación del suelo y en organizar tramas de pelotazo, como demuestran la operación Seminario y la operación Romareda".