Después de que en los primeros cuatro meses del año haya habido un buen puñado de festivos en Zaragoza, el ritmo va a bajar de aquí al verano. En la capital aragonesa, como en el resto de España y por supuesto también de Aragón, se comenzó el 2022 guardando fiesta el día de Año Nuevo, es decir, el 1 de enero. Poco después llegó el día de Reyes, el 6 de enero.

El 29 de enero en Zaragoza se celebró San Valero, pero al caer en sábado no fue festivo laboral. Primero se habló de trasladar la festividad, para no "fastidiar" a aquellas personas que trabajan de lunes a viernes, precisamente al viernes 28, un día antes, lo cual no gustó porque un buen puñado de trabajadores iba a librar el viernes, trabajar el sábado y volver a guardar fiesta el domingo. Así, se pasó al lunes 31.

En febrero el calendario se quedó vacío de festivos, pero después llegó el turno de la Cincomarzada, que también cayó en sábado y que también se trasladó al lunes 7. Y ya hay que llegar hasta Semana Santa. El Jueves Santo fue festivo, lo mismo que el Viernes Santo, que es nacional e inamovible. En cambio, el Lunes de Pascua, solo lo fue en algunas comunidades y Aragón no estaba entre ellas. Ya te contamos por qué.

En cuanto a Huesca, además de los citados festivos nacionales, se guardó fiesta el 22 de enero por San Vicente y en Teruel, el 19 de marzo por el Sermón de las Tortillas.

San Jorge está claro que fue festivo autonómico, ¿pero qué sucede con el 2 de mayo? El caso es que el 1 de mayo, Día del Trabajo, cae en domingo.

Es uno de los festivos nacionales y, al caer en domingo, se pasa al lunes en todo Aragón, es decir en las provincias de Zaragoza, Huesca y Teruel, igual que en el resto del territorio nacional.