El consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Joaquín Olona, ha comparecido esta mañana en las Cortes de Aragón para defender una colaboración público-privada en la prevención de incendios forestales. El consejero ha aclarado que no se trata de una privatización de este servicio, pero ha subrayado que "no se puede plantear una prevención en base a un presupuesto público".
Según Olona, la política forestal por la que se rige Aragón es "bastante cuestionable" y constata que "no estamos entendiendo lo que está pasando". Con ello, se ha referido a "esa manía de no dejar extraer nada" y que provoca un acumulación de combustible en los montes de la comunidad. Al respecto, el consejero ha recordado la sanción que se impuso a un agricultor por hacer unos trabajos de limpieza y que tiempo después "se ha visto que era necesario".
El consejero ha comparecido en este inicio del curso político a petición de los grupos parlamentarios de Izquierda Unida y Ciudadanos. En el caso de los primeros, con el objeto de informar sobre la gestión forestal y la prevención de incendios forestales y, para los naranjas, con el objeto de dar las explicaciones oportunas en relación al resultado de la gestión antiincendios forestales en Aragón durante este verano.
"Celos" hacia prohibiciones
Precisamente, ha sido la primera intervención del portavoz de Ciudadanos, Ramiro Domínguez, la que ha suscitado el debate político y en torno a la cual han girado el resto de participaciones. Desde el primer momento, el portavoz de la formación naranja ha puesto encima de la mesa la colaboración público-privada que luego le ha confirmado rotundamente Olona en su réplica. Domínguez ha criticado "los celos" hacia determinadas prohibiciones como, por ejemplo, que la ganadería extensiva no pueda entrar a ciertos montes que gozan de protección. De hecho, ha recordado la sanción de 1.500 euros que se impuso a Arturo Villaba, presente el hemiciclo, por labrar un ribazo. Además, ha cargado contra el Gobierno de Aragón por la inexistencia de un Plan de Gestión Forestal, lo que supone "un verdadero problema" a la hora de establecer una política forestal en la comunidad.
¿Por qué los incendios forestales se han convertido en un problema de protección civil?
Olona ha mostrado su total acuerdo con el portavoz de Ciudadanos en la necesidad de establecer esa colaboración público-privada. En esa línea, ha planteado las siguientes preguntas: "¿Por qué los incendios forestales se han convertido en un problema de protección civil? ¿Qué está pasando si aumentamos el presupuesto de extinción y prevención, y estamos en este problema de protección civil?" Respecto a ese Plan de Gestión Forestal que apuntaba Domínguez, ha indicado que se está finalizando su tramitación por parte del Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga).
La intervención de Izquierda Unida por parte de Álvaro Sanz ha cuestionado los trabajos que se realizaron con una excavadora retroaraña y que originaron el incendio de Ateca. "La pregunta que nos hacemos es por qué no se delimitaron ciertas actividades en el monte con el riesgo que había. Otras comunidades autónomas sí que tomaron la determinación de prohibir ciertas actividades, en Aragón solo fue una recomendación", precisó Sanz. Al respecto, Olona ha insistido que es un error prohibir: "Cuando el territorio nos está pidiendo flexibilidad, estamos poniendo prohibiciones. Es justo lo contrario a lo que debemos hacer".
"Deficiencias" en la extinción
El discurso de otros partidos, como el de Vox, ha ido en la misma línea de los dos anteriores. Su portavoz, Santiago Morón, ha demandado "reducir los residuos naturales de los montes, incentivando actividades como la ganadería extensiva y la silvicultura". Morón ha instado a Olona a abandonar "las políticas de ecologismo de salón porque los bosques del siglo XXI necesitan la acción del hombre para su mantenimiento".
Otras formaciones, como Chunta Aragonesista, han expuesto que el cambio climático es "una variable muy a tener en cuenta" por lo que el modelo de gestión tiene que evolucionar hacia la eficacia y la eficiencia. El PAR ha exigido "un estudio detallado de la masa forestal de Aragón" y ha denunciado que el operativo de prevención y extinción de incendios "adolece de una serie de deficiencias", que se deben afrontar con "un consenso político".
En unas de las últimas intervenciones, el portavoz del PP, Ramón Celma, ha abogado por medidas "reales" y "firmes" como "eliminar las trabas burocráticas para el aprovechamiento maderero" o "cambiar la normativa" para que las entidades locales puedan tomar cartas en el asunto.
