Radiografía de los accidentes mortales en Aragón: desde Salinas hasta Albalate pasando por Casetas

Desde que el 5 de mayo falleciera un camionero al caer por un barranco en la A-136, a la altura del término municipal de Salinas, las estadísticas aragonesas en materia de siniestralidad vial no dejaron de sumar muertes hasta contabilizar un total de nueve decesos a finales de mes con el último siniestro mortal registrado en Arén este pasado miércoles 30 de mayo. Cinco de ellos tuvieron lugar en la provincia de Huesca –Salinas, Puente Montañana, Canal de Berdún, Fonz y Arén–, tres en la provincia de Zaragoza –Épila, Casetas y Villafranca de Ebro– y uno en Teruel –Albalate del Arzobispo–.

No obstante, los datos de la DGT no incluyen al motorista de 22 años fallecido en Épila, cuyo cadáver fue encontrado el jueves 18 de mayo, 24 horas después de haberse denunciado su desaparición ante la Guardia Civil. Las primeras pesquisas apuntaban a una salida de vía, en la A-122.

También en la provincia de Zaragoza, pero una semana después, un camionero portugués de 54 años falleció atropellado por otro camión en la AP-2 tras haberse apeado de su vehículo para arreglar los neumáticos. La Benemérita confirmó que la víctima había señalado correctamente la parada y se había puesto el chaleco reflectante.

Tampoco el ocurrido en La Cartuja el pasado viernes, cuando un conductor murió tras salir despedido de su coche en La Cartuja después de colisionar con un pequeño muro de hormigón.

El tercero de los accidentes mortales en suelo de Zaragoza provincia, y el único en vía urbana, tuvo lugar en Casetas: una mujer de 68 años fue arrollada el 24 de mayo por un camión de la basura cuando cruzaba un paso de peatones no semaforizado en la plaza Ramón y Cajal. Precisamente, la circulación y la siniestralidad en las calzadas urbanas copa buena parte de los debates sobre la seguridad vial. En este sentido, Juan José Alba, profesor de Ingeniería Mecánica en la Universidad de Zaragoza, denuncia que las calles están repletas de «elementos de distracción».

«Estamos intoxicados con mucha información de señales, semáforos y carteles publicitarios dirigidos a los conductores», cuenta Alba, a lo que añade: «El número estímulos es impresionante y se divide la atención a numerosos estímulos. Se debe simplificar el proceso de circular a todos los usuarios de la vía».

La seguridad vial de Zaragoza se somete a examen

En territorio turolense, un hombre de 42 años murió en la A-223, entre Albalate del Arzobispo y Lécera, al verse envuelto en una colisión múltiple: recibió un impacto trasero de modo que salió despedido al carril contrario y chocó frontalmente contra un tercer vehículo. No hubo que lamentar más heridos.

Por último, la provincia de Huesca sumó cinco muertes en sus vías interurbanas. Al primer fallecido en Salinas el 5 de mayo, se sumó al día siguiente un leridano de 52 años que se salió de la N-232 y chocó contra una arqueta de piedra, a la altura del término municipal de Puente Montañana. También se salió de la vía, en este caso de la A-1236, un hombre de 57 años que chocó contra un muro en Fonz. A ellos se suma una mujer de 48 años que fue atropellada el 15 de mayo en la N-240, a la altura de Berdún, y un hombre de 58 años que murió en Arén al verse involucrado en un choque entre un coche y un tractor.