CELEBRACIÓN DE SAN JORGE

Muel hace balance en el Día de Aragón

La localidad zaragozana atraviesa un buen momento, con la vista puesta en atraer nuevas inversiones y aumentar sus servicios

La Ermita de la Fuente de Muel con la iglesia de San Cristóbal y su torre mudéjar al fondo.

La Ermita de la Fuente de Muel con la iglesia de San Cristóbal y su torre mudéjar al fondo. / VANESA ROYO

Miguel Bertojo

Una suave brisa con aroma a tierra mojada delata una de las muchas perlas que atesora la muy noble villa de Muel: su parque, situado al pie de la presa romana del siglo I a.C. que abastecía el valle del Huerva. Un legado único que rivaliza sin embargo con otros conjuntos y/o prácticas históricas, o con las bondades de su entorno, sus riberas y otros sitios y parajes de innegable valor medioambiental: la zona de especial protección para aves (ZEPA) o el cabezo de San Borombón.

La villa trata sin embargo de armonizar su pasado, sobre todo agrícola y aún activo, con un presente industrial, pero también de servicios y un turismo cultural, ecológico y de ocio en vías de consolidación. Además de la Bodega Heredad Ansón, la Cooperativa Virgen de la Fuente reúne hoy a 21 viticultores y oleicultores de la villa y municipios limítrofes. 

Por su parte, Agromuel, su homóloga cerealista, representa a 70 socios tanto locales como de localidades próximas. Por otro lado, la panorámica de su vega delata hectáreas de regadío y de invernaderos dedicados a productos hortícolas. "Además de la crisis que sufre el campo en general y de la asimetría entre pequeños agricultores y grandes distribuidores o fondos de inversión, el campo depende en cualquier caso de directrices sobre todo nacionales y europeas que deben garantizar su viabilidad", describe Israel Remón, alcalde de Muel. 

La ermita de la Virgen de la Fuente alberga en su interior cuatro frescos de Goya.

La ermita de la Virgen de la Fuente alberga en su interior cuatro frescos de Goya. / VANESA ROYO

ACTOS FESTIVOS DEL 23 DE ABRIL

El programa de actos del día de San Jorge, «una jornada tanto reivindicativa de nuestras señas de identidad, del Estatuto y el autogobierno de Aragón, será sobre todo festiva». Incluirá pasacalles protagonizados por la colla de Gigants de Fraga, los Cabezudos de Muel y las dulzainas y gaitas de boto de La Quinta del Sordo. 

El interior del pabellón polideportivo se convertirá a partir del mediodía en un espacio de juegos tradicionales para todas las edades: ya sea la rana, la soga, los aros, el lanzamiento de alpargata o las carreras de sacos. La jornada proseguirá con un concurso de ranchos a cargo de las cuadrillas de la localidad, seguido de un café-concierto.

"En cualquier caso, vamos a seguir atrayendo más empresas −sostenibles a nivel medioambiental− para nuestros dos polígonos industriales, que incrementen la calidad de vida del vecindario; pero, sobre todo, que ofrezcan oportunidades a jóvenes y desempleados que permitan fijar población. De hecho, las casi 40 presentes emplean a unos 1.200 trabajadores".  

Los servicios que hoy ofrece Muel suplen incluso las deficiencias de otros pueblos del entorno: "Hablamos de una farmacia, un estanco o una papelería, de dos entidades de crédito, seis establecimientos hosteleros urbanos y un séptimo en la gasolinera anexa a la autovía −y sendas concesiones estivales−; dos carnicerías, una pescadería, un supermercado y una panadería tradicional que todavía hornea la famosa torta de la localidad", enumera Remón.  

Muel posee un entorno natural inigualable para dar agradables paseos

Muel posee un entorno natural inigualable para dar agradables paseos / VANESA ROYO

Una población en crecimiento

El hecho es que en este último quinquenio, la población no ha cesado de crecer: "Son necesarias por tanto más prestaciones que mejoren la calidad de vida de todos. Y eso exige más ingresos procedentes de la actividad económica o de la instalación de energías renovables, siempre y cuando no representen una hipoteca para el territorio, deprecien el paisaje o limiten el crecimiento de la villa". 

Por otra parte, "contamos con un tejido asociativo muy activo: organizaciones agrarias, entidades empresariales, sectoriales o de ocio, agrupaciones musicales o clubes y sociedades deportivas. Su compromiso garantiza que sigamos siendo una población de referencia en la comarca", concluye el alcalde.

La tradición alfarera en la localidad se remonta al siglo VIII.

La tradición alfarera en la localidad se remonta al siglo VIII. / VANESA ROYO

UN FONDO HISTÓRICO INGENTE

De un tiempo a esta parte, Muel reivindica su larga tradición cerámica, fechada en el siglo VIII, y tejera. Tras casi extinguirse en el primer cuarto del siglo XX, el papel providencial del Taller Escuela, dependiente de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ), que este año cumple su sexagésimo aniversario, y de la Asociación de Ceramistas de Muel han permitido mantener semejante memoria y el propio oficio. "El motivo de nuestra reciente incorporación a Territorio Mudéjar no es otro que poner en valor este acervo, tanto material –ya sea la torre mudéjar de la iglesia de San Cristóbal, el trazado urbano…− como inmaterial, ligado a etapas clave de la historia local". Aun así, "el catálogo patrimonial incluye, además, la ermita Virgen de la Fuente −Bien de Interés Cultural (BIC) por los cuatro frescos que Goya pintó en 1770 en las pechinas de su cúpula− que corona la presa; los restos de la fortaleza del Marquesado de Camarasa o diferentes vestigios prehistóricos, íberos o visigodos. Una diversidad que demanda un centro de interpretación que concretaremos en esta legislatura", aseguró Remón.