El fugado de El Gancho fue ‘cazado’ fumando en las calles de Deltebre

La cara de Riad Roumani, el «peligroso» joven argelino de 23 años que este miércoles intentó matar de una puñalada en el pecho a un marroquí de 20 años en El Gancho, se encontraba en los medios de comunicación, había sido difundida a través de las redes sociales y acompañaba a cada una de las patrullas de la Policía Nacional en Zaragozay el resto de España. Esta labor de difusión en clave de colaboración ciudadana fue decisiva para detenerle anteayer en Deltebre, ya que fue reconocido cuando abandonó la vivienda donde se había refugiado para fumar un cigarro.

Hasta esta localidad de la provincia de Tarragona logró huir en coche desde Zaragoza acompañado de unos amigos que luego le encontraron refugio en el citado domicilio hasta que este profesional del delito acabó cometiendo un error que su experiencia delictiva no le perdonará nunca: posiblemente ingrese en prisión hasta la celebración del juicio. Inmediatamente fue trasladado a los calabozos de la Policía Nacional de Tortosa y ayer se acogió a su derecho a no declarar en las dependencias de la Jefatura Superior de Policía de Aragón. Está previsto que hoy pase a disposición judicial ante el Juzgado de Instrucción número 11 de Zaragoza, en funciones de guardia. Lo hará asistido por los letrados que han asumido su defensa: Carmen Sánchez Herrero y Luis Ángel Marcén.

A Riad Roumani se le imputa un delito de homicidio en grado de tentativa y la causa será dirigida ahora por el Juzgado de Instrucción número 9 de la capital aragonesa que el pasado miércoles, en funciones de guardia, asumió el caso. Si el proceso judicial abierto ahora contra él finaliza con una sentencia condenatoria de cárcel, debería conmutarse esta pena con su expulsión de España de acuerdo a los postulados que defiende la Ley de Extranjería.

El fugado de El Gancho, detenido en Tortosa

Riad ya había recurrido a este modus operandi de fuga en anteriores ocasiones y, de hecho, ya había sido buscado anteriormente por las autoridades españoles si bien lograba ocultarse en Francia. Este joven de 23 años siempre acababa regresando a España donde, en situación irregular, acumula 20 antecedentes hasta la fecha. Entre ellos aparecen robos con violencia, amenazas, lesiones, tráfico de drogas, hurtos, receptación de objetos robados previamente y okupación de inmuebles.

Precisamente, el Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón baraja que este apuñalamiento está enmarcado en un ajuste de cuentas por tráfico de drogas. De hecho, la víctima, Ousmane A., también cuenta con un extenso currículum delictivo y el pasado mes de junio fue detenido por la Brigada de Seguridad Ciudadana por participar en una reyerta entre un grupo de marroquíes y otro de argelinos por un tema de venta de drogas. Fue en la misma calle Cerezo donde el otro día recibió una puñalada en el pecho.

Como consecuencia de las heridas sufridas tuvo que ser trasladado de urgencia al Hospital Universitario Miguel Servet, donde ingresó en la unidad de cuidados intensivos (uci) con un pronóstico muy grave. Allí todavía permanece ingresado porque sufrió una profunda cuchillada lateral que le perforó el pulmón y se quedó muy cerca del corazón.

El apuñalamiento tuvo lugar al mismo tiempo que el nuevo Jefe Superior de la Policía de Aragón, Florentino Marín Parra, tomaba posesión de su nuevo cargo en la sede de la Delegación del Gobierno en Aragón.