Hace más de un año y medio que APLA, la Asociación de Productores de Leche de Aragón, desapareció. La consejería de Agricultura, con Modesto Lobón como titular, decidió no renovar el convenio que aportaba el 70% de la financiación a la entidad porque consideraba que "no era prioritaria". APLA defendió los intereses de los ganaderos en el 2011, cuando Clesa, propiedad de Nueva Rumasa, dejó de pagarles.