¿Cómo afecta el consumo de porno a tu sexualidad?

El acceso de los menores al porno se ha convertido en un grave problema para las nuevas generaciones. Según diversos estudios, la edad a la que los menores consumen pornografía por primera vez en España se sitúa entre los 9 y los 11 años.

Los niños acceden a este contenido, en la mayoría de los casos, sin que sus familias se enteren y de forma accidental, y la gran parte del contenido pornográfico al que tienen acceso contiene violencia. 

Según el médico y sexólogo Santiago Frago, estas imágenes generan un impacto en la conducta de los menores y afectan a su sexualidad. El principal efecto que tiene el porno sobre los adolescentes es confundir la ficción con la realidad. 

Efectos del porno sobre la sexualidad de los jóvenes

"El porno distorsiona la realidad, magnifica la desigualdad entre sexos y cosifica a la mujer", indica el especialista. Por otra parte, este tipo de contenidos "excluye los sentimientos y la comunicación del encuentro íntimo y presenta falsas relaciones en las que nunca hay miradas a los ojos ni sentimientos".

Por decirlo de una manera rápida, "la biología aplasta al amor", resume el también terapeuta del centro Amaltea, que hace referencia a los errores sexuales, falsas expectativas y conductas de riesgo, como hacerlo sin preservativo, que se crean con la pornografía.

Hace años, cuando no existía internet, era frecuente que los jóvenes tuvieran sus primeros encuentros íntimos y después accedieran a la pornografía, pero hoy en día ocurre lo contrario. Los jóvenes ya han accedido al porno antes de iniciar sus relaciones sexuales.

Para el especialista en sexología, el acceso prematuro a contenidos pornográficos "determina la manera de entender las relaciones sexuales y puede generar confusión a todos los niveles porque no tienen la posibilidad de comparar".

Los falsos mitos sobre el sexo que hay en el porno

Además, según Frago, el porno promueve falsos mitos sobre el sexo, como el de la importancia del tamaño del pene y de los genitales, las expresiones faciales, la duración del acto sexual o los cuerpos perfectos.

Estas creencias "no se corresponden con lo que luego se van a encontrar", de forma que puede llegar a generar frustraciones en la vida sexual y en las relaciones de pareja.

"En algunos casos, a la larga puede llevar a tener menos encuentros, vivir el erotismo de manera individual más que compartida, y a requerir estímulos mucho mayores para disfrutar con la pareja", explica el terapeuta.

Estas falsas expectativas en torno a la sexualidad o el amor romántico no solo se dan en el porno, sino también en muchas series de sexo-ficción que son muy seguidas por la gente joven y que también "transmiten modelos de erotismo nada realistas". 

La educación afectivo sexual en las escuelas, la "mejor vacuna"

Sin embargo, el médico indica que no se debe "caer en el victimismo y pensar que el porno tiene la culpa de todos los males del mundo", y señala como "mejor vacuna" la educación afectivo sexual con programas en las escuelas y trabajo con las familias. 

Para evitar que el porno pase factura a la sexualidad, el terapeuta ve bien la medida anunciada por el Gobierno de España de restringir el acceso de los menores a los contenidos pornográficos. "Los jóvenes se van a encontrar con el porno de manera inevitable, pero cuanto más tarde lo hagan, mejor", apunta.

¿Qué dice la nueva ley en España para impedir el acceso al porno de los menores?

El Gobierno de España anunció hace dos semanas que hará una nueva ley para impedir el acceso de los menores al porno, un problema que el presidente Pedro Sánchez calificó de "auténtica epidemia".

Según explicó, "uno de cada cuatro jóvenes de menos de 12 años ha tenido o tiene acceso y consume porno" y "casi la mitad de los jóvenes de menos de 15 años lo consumen". Algo que afecta a su formación y a sus futuros comportamientos en un tema tan importante como es la sexualidad.

España se suma a otros países, como Reino Unido o Francia, que han empezado a tomar medidas para impedir el acceso de los jóvenes al porno

Todavía no está definido cómo se pretende comprobar la edad del usuario para acceder a las páginas, pero el gobierno baraja algunas opciones como el uso del DNI, de códigos QR y de certificados digitales. Que no sirva un simple botón de 'tengo más de 18 años'. España se suma así a otros países como Reino Unido o Francia que ya han empezado a tomar medidas para restringir el acceso de los jóvenes a la pornografía.

Para el médico y sexólogo Santiago Frago, "toda iniciativa que dificulte la exposición al porno de menores es una buena iniciativa". No obstante, tiene dudas sobre cómo hacerlo por otras vías, ya que las redes sociales son un marco "muy difícil de controlar".

Por eso, más allá de esta medida, el terapeuta cree fundamental el trabajo con las familias y con los jóvenes, "hablar con los hijos e hijas de sexualidad, porque eso nos permitirá hablar también de porno". Conseguir hablar con los jóvenes es el primer paso, así como llevar la educación sexual a las aulas y proporcionar webs de información fiable donde puedan satisfacer su curiosidad.