«¡Viva Zaragoza, viva la Virgen del Pilar, viva la jota aragonesa!». Tres años después, por fin llegó el momento. Ante una plaza abarrotada, la jota ha sido la encargada de dar paso a las Fiestas del Pilar más esperadas, las del regreso a la normalidad. Atrás han quedado las restricciones y los condicionantes. Sara Caballero, José Miguel Pamplona, Sara Blanco y Diego de Pablo han sido los cuatro portavoces que, en nombre del folclore tradicional aragonés, han leído uno de los pregones más especiales que se recuerdan.

En un discurso coral, preparado y escrito por José Luis Melero, los cuatro representantes elegidos para la ocasión han dejado bien claro que la jota está muy viva, quizá más que nunca, algo que fue una constante reivindicación en todo momento. En unas palabras pronunciadas como si el propio folclore hubiese cobrado vida, la Jota ha asegurado que se sintió tan querida en esta tierra, que decidió quedarse para siempre, desde el último rincón del Pirineo hasta la zona más al sur de Teruel. «Me siento parte indisoluble de esta bonita tierra», se escuchó pronunciar, ante un Pilar entregado. Un pueblo, el aragonés, que decidió bailarla «veloz, con desparpajo, pasión y arrebato», tal y como la Jota se ha encargado de recordar.

La plaza del Pilar, a reventar en el pregón de fiestas

La plaza del Pilar, a reventar en el pregón de fiestas Jaime Galindo

Por ello, el pregón ha hecho especial énfasis en su sentido –recíproco– de pertenencia con los aragoneses: «Si de alguien soy, especialmente, es del pueblo aragonés, humilde y trabajador». Un pueblo que, afirma, le ayuda en sus cánticos «al amor, a la paz, a la libertad y a la igualdad». Un poder transformador de la sociedad que trasciende a toda creencia, gusto y edad posible. Y, para muestra, el fervor que ha desatado Diego de Pablo, el más joven de los portavoces, con su espíritu, fuerza y pasión al hablar sobre su pasión más pronunciada: la jota aragonesa. Una potencia en la que se han involucrado de lleno los miles de asistentes, que ya habían sido partícipes de la fiesta desde el principio, cuando toda la plaza ha coreado junto a los pregoneros 'S’ha feito de nuey', una jota aragonesa. Y en aragonés.

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Las mejores imágenes del pregón de las Fiestas del Pilar 2022 Jaime Galindo / Ayuntamiento de Zaragoza

Y es que, como bien claro ha dejado la Jota, «cuando hay jolgorio, parece que os acordáis más de mí». Aunque, eso sí, tampoco faltó su reivindicación ‘personal’: «Llevo acompañándoos toda la vida, y cada vez me encuentro más joven». Y no solo lo reivindicó, sino que lo demostró a lo largo de la tarde. Un ánimo que debe servirle de impulso para conseguir su merecida calificación de Patrimonio de la Humanidad.

Un canto emocionante

Tras las tradicionales loas a la ciudad y a la Virgen, ha llegado el momento que, sin duda, más emociona a todos los zaragozanos y aragoneses: el 'Canto a la libertad'. Un himno que empezó siendo una bonita tradición en recuerdo a José Antonio Labordeta y que ya se ha convertido en una obligación que, como la jota, trasciende creencias y generaciones. Los cachirulos en alto y las banderas de Aragón se han fusionado con las voces de una ciudad, Zaragoza, en la que parecía respirarse más aragonesismo que nunca. Tres minutos y medio en los que solo ha habido un aliento en toda la ciudad, al unísono, en recuerdo del 'abuelo'.

Zaragoza entonó un 'Canto a la Libertad' lleno de sentimiento en el pregón de las Fiestas del Pilar

Zaragoza entonó un 'Canto a la Libertad' lleno de sentimiento en el pregón de las Fiestas del Pilar El Periódico de Aragón

El alcalde Jorge Azcón –que no sufrió los habituales pitos– y la vicealcaldesa Sara Fernández también han dejado patente su entusiasmo por el regreso de las fiestas a la que, como ellos mismos han proclamado desde el balcón del ayuntamiento, es «la mejor ciudad del mundo». «Somos la ciudad más acogedora de España, y tres años después volveremos a llenar las calles», ha exclamado la vicealcaldesa. «¡Vamos a demostrarlo al mundo entero!», ha concluido un eufórico Azcón.

Para rematar, el cohete anunciador y los fuegos artificiales posteriores han confirmado, ahora sí, que los Pilares están de vuelta. Y, como la propia Jota ha subrayado en su discurso, la premisa irrenunciable debe ser la de siempre: «Divertíos, respetad y convivid».

Aquí se puede leer el pregón completo.