Los vecinos de la localidad zaragozana de Pina de Ebro confían en que la crecida del río Ebro, que podría llegar a su población, no cause daños al municipio.

En declaraciones a Efe, la alcaldesa de esta población, Marisa Fanlo, ha señalado que el aumento del caudal se empezó a notar durante el fin de semana, aunque sin causar alarma alguna a los vecinos de localidad.

"El aumento del caudal se notó el fin de semana -ha destacado-, que después de estar el río casi seco quince días atrás, empezó a subir bastante de nivel".

La edil, que ha expresado su confianza en que la crecida "no haga mucho mal", ha comentado que desde la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) no se ha alertado a su población de posibles afecciones derivadas de la avenida.

Fanlo ha señalado, además, que Pina de Ebro dispone de unas zonas de inundación controlada, así como de una mota de defensa para hacer frente a las riadas y minimizar los daños.

"Ya veremos cómo funciona la mota -ha subrayado sin embargo-, porque en 2015 reventó y provocó la inundación de la carretera".

La alcaldesa ha expresado sus reservas en relación a la funcionalidad de la referida mota, cuya construcción fue paralizada durante un tiempo debido al aumento de los caudales del Ebro y continuada más tarde, sin llegar a completarse la escollera prevista.