Futuro imperfecto. Solo seis campeones juveniles siguen en el Real Zaragoza

Tras la salida de Hernández y Castillo, solo seis componentes de la plantilla del Real Zaragoza juvenil campeón de España hace cuatro años continúan en el club y únicamente Francés, Francho y Puche han llegado al primer equipo

Puche, segundo por la izquierda arriba; Francés, cuarto, y Francho, segundo por la izquierda, junto al resto de campeones juveniles hace cuatro años.

Puche, segundo por la izquierda arriba; Francés, cuarto, y Francho, segundo por la izquierda, junto al resto de campeones juveniles hace cuatro años. / EL PERIÓDICO

Jorge Oto

Jorge Oto

La Ciudad Deportiva aglutina gran parte de las esperanzas del zaragocismo en un futuro mejor. La larga estancia del primer equipo del Real Zaragoza en Segunda División y la consecuente repercusión en el maltrecho estado de las arcas del club han sido determinantes para multiplicar esfuerzos en la crianza y desarrollo del producto de denominación de origen. Cantera sobre cartera, como ya advirtió Miguel Pardeza en su etapa al frente de la dirección deportiva del club antes de que las vacas flacas se instalaran en torno a una entidad atrapada en el tiempo.

Los logros de la cantera y la irrupción de jóvenes valores que han ejercido de salvadores del club, ya sea desde el terreno de juego o a través de ventas vitales para la subsistencia, han convertido a los canteranos en protagonistas principales. Como hace cuatro años, cuando el División de Honor juvenil de Iván Martínez hizo historia al proclamarse, por primera vez, campeón de España al conquistar la Copa de Campeones en la final disputada en Balaídos ante el Villarreal. 

De aquel equipo, que se ganó el derecho a disputar la Youth League (la Liga de Campeones juvenil), tan solo tres jugadores han llegado al primer equipo. Son los casos de Alejandro Francés, Francho Serrano y Miguel Puche. Todos ellos, capitanes de aquella escuadra juvenil, con ficha de un primer equipo en el que el mediocentro es fijo y el central, a pesar de su irregular campaña, sigue figurando entre los defensas con más proyección de la categoría.

Pero es que solo otros tres (Acín, Borge y Benedet) permanecen en la disciplina del club. El resto se ha quedado en el camino ya sea porque dejaron de contar para el Zaragoza o porque alguno decidió emprender una nueva aventura lejos de casa.

Los últimos en salir

Los últimos en salir han sido Javi Hernández, el capitán de aquel equipo para la historia, y Castillo, aquel centrocampista exquisito. El Real Zaragoza anunció hace apenas unos días que ambos dejan de pertenecer al club una vez que han alcanzado la edad límite para estar en el filial. En el caso del medio, renovó el pasado verano por una temporada con opción a tres más como jugador del primer equipo. Como no se ha ejecutado esta vía, Castillo queda libre.

Antes se fueron otros muchos. Como el portero Juan Carlos Azón, que el pasado verano aceptó la oferta del Logroñés. O Andreu Torres, Álvaro Martín, Dani Quesada, Rodri Val, Otu, Juanma, Escuin, Sancho, Jiménez, Marvin, Vela o Alastuey, que decidió marcharse a Estados Unidos.

Claro que también hay que contar con Iván Azón, que, aunque no figura entre la nómina de campeones en aquella gloriosa campaña porque estaba cedido en El Olivar, también representa el éxito de una cantera que sigue dando frutos, si bien muchos se quedan por el camino.

Cuestión de progresión

Media docena de los integrantes de aquella plantilla continúan perteneciendo al Real Zaragoza y apenas tres han llegado arriba. El meta Acín y Borge continuarán en el Deportivo Aragón a la espera de esa oportunidad en un primer equipo en el que han contado ya con entrenamientos, viajes e incluso minutos (Borge debutó en Copa con Víctor Fernández en la 19-20). La situación de Benedet, por su parte, es más delicada ya que el jugador, que en octubre cumplirá los 23 años, se encuentra en pleno proceso de recuperación de una grave lesión y su futuro es una incógnita. 

Cuatro años después de aquella gloriosa primavera de 2019, pocos han llegado arriba. De hecho, hubo generaciones más exitosas. Como, por ejemplo, la de Clemente, Soro, Marc Aguado, Morlanes y los gemelos Vicente. Cuestión de progresión. Cuestión de futuro.