Poussin, el portero más breve

La entrada de Edgar Badía en el equipo abre de par en par la puerta de salida de Gaetan Poussin, señalado por sus graves errores en los pocos partidos que ha jugado. No es muy habitual que un jugador fichado en verano salga en invierno, aunque hay un puñado de precedentes en el Real Zaragoza desde que se instaurara el mercado de enero en la temporada 1994-95. Eso sí, el francés será el primer portero de esa lista. Hasta ahora ningún guardameta había abandonado el club la misma campaña de su llegada.

Sí ha ocurrido en once ocasiones con jugadores de campo. El último caso fue el del panameño César Yanis, cedido en el verano de 2021 por el Club del Este y al que el Real Zaragoza pudo dar salida in extremis el último día del mercado invernal tras haber jugado únicamente dos partidos. También a finales de enero pero de 2019 se rescindió el contrato de Jeison Medina, llegado en verano del Itagüí Leones y que solo jugó 18 minutos en dos partidos hasta su marcha.

En enero de 2017 el Real Zaragoza se deshizo de dos futbolistas con los que se había reforzado en verano, el delantero Juan Muñoz, cedido por el Sevilla y de un paso gris por el equipo, y el central de 19 años Razvan Popa, procedente del Inter de Milán y que acabó cedido en el Burgos.

Un año antes fueron hasta tres los jugadores que, llegados en verano, se marcharon en invierno sin pena ni gloria. Aria Hasegawa, primer jugador japonés de la historia del club, salió tras participar únicamente en ocho partidos y dejar de contar tras la marcha de Popovic, Alfredo Ortuño pidió su salida pese a ser el máximo goleador del equipo por no sentirse querido y acabó en el Mallorca y el uruguayo Jorge Díaz fue cedido al Numancia tras participar en 18 partidos.

Dos tuvieron un paso tan breve en la temporada 2011-12. Antonio Tomás solo jugó tres partidos procedente del Deportivo de La Coruña antes de rescindir su contrato en febrero de 2012 para irse al CSKA de Sofía. El mexicano Efraín Juárez regresó al Celtic de Glasgow tras jugar quince partidos porque, además de su pobre rendimiento, el club necesitaba su ficha de extracomunitario para Obradovic.

Uno de los casos más paradigmáticos de brevedad fue el del portugués Fabio Coentrao, que estuvo seis meses desde el verano de 2008, incluido en la operación por Aimar con el Benfica, hasta que salió en enero de 2009 tras haber jugado solo 7 minutos frente al Alavés. Después el Real Madrid pagó 30 millones por él. El primero de esta lista de fichajes breves fue el argentino Jorge Martínez, que estuvo unos meses desde el verano hasta diciembre de 1999, jugando solo un partido con la camiseta zaragocista.

Antes de la instauración del mercado invernal en la 94-95 hubo también algún caso de un futbolista que empezó y no terminó la temporada, siendo el más recordado el del alemán Andreas Brehme, fichado en 1992 y que rescindió su contrato en abril de 1993 tras un polémico paso por el equipo, con continuos viajes a Alemania. El bajo rendimiento suele ser el motivo habitual para una baja tan prematura y será también lo que provoque que Gaetan Poussin inaugure la lista de guardametas que deben abandonar el equipo el mismo curso que llegaron. En su caso, con dos años más de contrato por delante.