La 25ª jornada de Segunda

Aquí y ahora. La previa del Real Zaragoza-Sporting

El aspirante Sporting examina la talla de un Zaragoza menor obligado a mantener la solvencia en La Romareda mostrada con Velázquez

Zedadka, Edgar Badía y Guti, los tres fichajes del Zaragoza durante el mercado de enero, posan junto al escudo del club.

Zedadka, Edgar Badía y Guti, los tres fichajes del Zaragoza durante el mercado de enero, posan junto al escudo del club. / REAL ZARAGOZA

Jorge Oto

Jorge Oto

Atrás queda ya un mercado de mínimos que bajó la nota alta lograda por Cordero en verano. La esperada llegada de Guti y la sorprendente de Zedadka se unieron a la necesaria de Badía para conformar las tres caras nuevas de un Real Zaragoza ya sin Luna y Bermejo que vuelve a casa para medir su verdadera talla ante uno de los claros aspirantes al ascenso. Llega el Sporting a La Romareda con la intención de explotar la inconsistencia de un equipo aragonés que sigue sin escapar de una irregularidad que le mantiene atenazado desde que pasaron las cinco primeras jornadas. 

En esa incesante búsqueda de identidad continúa Velázquez, incapaz de momento de despojar al Zaragoza de esa vulgaridad responsable de su larga estancia en zona de nadie. Dos victorias y cinco empates lucen en la hoja de servicios del técnico en los ocho partidos que acumula ya en el banquillo. El bagaje se completa con la derrota en su estreno, hace más de dos meses, en Albacete. Desde entonces no pierden los aragoneses, pero el problema es que ganan muy poco. 

Bien es cierto, en todo caso, que Velázquez sí está logrando enderezar el errático rumbo en casa de un equipo que no cae ante su gente desde hace más de dos meses, cuando mordió el polvo ante el Huesca en el último encuentro de Escribá como local. Con el pucelano, el balance es notable: dos victorias y un empate en tres partidos en los que se incluyen las victorias ante el líder, Leganés (1-0), y Andorra (2-0) y el empate (2-2) frente al Levante, otro candidato a luchar por el ascenso y al que el Zaragoza no supo liquidar a pesar de tenerlo contra las cuerdas al descanso. A esa solvencia en su feudo se aferra un cuadro aragonés obligado a dar de una vez ese puñetazo en la mesa que meta algo de miedo a unos competidores que, hasta ahora, ven a los blanquillos como una amenaza irreal o, al menos, lejana.

A tiempo de todo

El Zaragoza, cierto es, aún está a tiempo de todo, pero cualquier aspiración pasa por adquirir cuanto antes esa regularidad que haga las victorias más habituales y los empates menos rutinarios. No perder, ya se sabe, tiene sentido solo si los triunfos abundan más que las tablas, una tendencia que se viene repitiendo demasiado en los últimos cursos.

Para revertirlo todo, Velázquez recupera a Toni Moya, sancionado en el festival de bostezos en Alcorcón. El centrocampista parece destinado a ser de la partida para sustituir a Marc Aguado, que vio la quinta amarilla en Santo Domingo, y acompañar a Francho en una medular en la que Grau podría repetir, aunque también es posible que Maikel Mesa retrase su posición para que Mollejo acompañe a Azón en punta. Bakis, de vuelta por fin, esperará en el banquillo.

También habrá cambios atrás obligados por la lesión de Gámez. Zedadka podría llegar y besar el santo para ocupar el carril diestro mientras que el otro costado sería territorio de Lecoeuche. En cambio, todo apunta a que no habrá movimientos en el centro de la zaga, donde Francés, Mouriño y Lluís López apuntan a seguir dejando fuera a Jair. 

Porque Velázquez tiene claro que el dibujo, de momento, no se toca. Así quedó claro, entre otras cosas, en el diseño de un mercado orientado hacia esa composición táctica y en el que la idea inicial de reforzar el lateral zurdo pasó a mejor vida tras la aparición de los carrileros, con Mollejo, Valera acompañando a Lecoeuche como opciones para ocupar ese puesto.

El Sporting, por su parte, acude a tierras aragonesas sin Guille Rosas y Campuzano y con la vuelta de Djurdjevic. Ramírez se ve obligado a hacer al menos dos cambios, uno en defensa donde Pascanu volverá al lateral derecho tras la lesión de Rosas. La ausencia del lesionado Campuzano será cubierta, previsiblemente, por Djurdjevic si bien el recién llegado Mario González también cuenta con opciones.

En el medio, Christian Rivera, Nacho Méndez y Roque Mesa se juegan dos posiciones, mientras que Cote, con cuatro amarillas, podría dejar su puesto a Pablo García para reservarlo de cara al derbi asturiano ante el Oviedo.