El Rey Felipe VI visita por sorpresa Zaragoza

Los lazos que unen al Rey Felipe VI con Zaragoza siguen haciéndose más fuertes. Si su estancia en la capital aragonesa durante su formación en la Academia General Militar ya es un buen motivo para ser recordado y querido, la estancia de la princesa Leonor con el mismo motivo ha supuesto una oportunidad más para ensanchar esa relación.

Este sábado, Felipe VI ha visitado Zaragoza por sorpresa, fuera de las previsiones de su agenda, "coincidiendo con una ocasión especial", según traslada Casa Real. Durante su estancia se ha dejado ver por el centro de la ciudad y ha comido en el restaurante Tajo Bajo del Grupo Vaquer, situado en la plaza del Pilar.

El restaurante, conocido por su fuerte apuesta por la cocina aragonesa contemporánea, está dirigido por el destacado chef Rubén Martín, quien ha dejado su huella en cada plato servido en esta visita real. La comida se ha destacado por la "cuidadosa selección de ingredientes y la creatividad en la presentación". La degustación real incluyó una variedad de platos que destacaron la riqueza y diversidad de la gastronomía aragonesa.

Estos son los platos que ha degustado, según Casa Real:

• Croqueta de borraja: un bocado que celebra la borraja, uno de los ingredientes más emblemáticos de la región.
• Cecina de buey con queso Patamulo y aceite trufado: una combinación de sabores intensos que se fusionan de manera excepcional.
• Gyozas de Ternasco de Aragón con calabaza y miel: un toque autóctono que enaltece la tradición culinaria de la región.
• Arroz cremoso de boletus, longaniza de Graus y foie: un plato que evoca los aromas y sabores del Pirineo aragonés.
• Alcachofitas fritas con crema de jamón de Teruel y corteza de cerdo: una exquisitez que resalta la versatilidad de la alcachofa.
• Tataki Baturro: una sorprendente creación que destaca la carne de ternera del Pirineo, acompañada de sabores regionales.
• Torrija con helado de guirlache: un postre que combina lo tradicional con un toque de modernidad.

 Los vinos que han acompañado la experiencia gastronómica, han sido vinos de bodegas Laus, añadiendo un toque aún más autóctono si cabe, a la velada.

 Durante la visita, Su Majestad el Rey "expresó su gusto por cada uno de los platos, destacando especialmente el Tataki Baturro". El Rey elogió la sabrosa combinación de ingredientes y mostró un genuino interés en conocer la inspiración detrás de cada plato, subrayando la importancia de representar las tres provincias de Aragón en la comida.

 El Restaurante Tajo Bajo, bajo la dirección de Rubén Martín, continúa consolidándose como un referente de la gastronomía aragonesa contemporánea, y esta visita real refuerza aún más su posición en el panorama culinario regional y nacional.