Las evaluaciones de sexto de Primaria se se realizarán a final de curso pero no afectarán a las notas finales ni a la promoción de los alumnos, ha informado hoy el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón, que está en contra de este tipo de pruebas que se incluyen en la Lomce.

Estas evaluaciones las realizará el propio profesorado de sexto de Primaria y el Departamento facilitará a todos los centros la información sobre los aspectos que deben tener en cuenta a la hora de realizar la evaluación y emitir el informe correspondiente para los padres.

Será también el Departamento el que supervisará la elaboración de dichos informes y los validará a través de las comisiones externas creadas al efecto.

Los informes estarán basados en los datos recogidos por el profesorado a través de las los diferentes instrumentos de evaluación utilizados durante el curso en el proceso de evaluación continua, junto con las pruebas finales.

Con estas medidas, Educación quiere unir los principios de evaluación continua, por la participación de los maestros en las evaluaciones, y la valoración del grado de adquisición de las competencias básicas al finalizar la etapa.

En referencia a los profesores, el Gobierno de Aragón confía plenamente en su capacidad profesional y ha remarcado que son quienes mejor conocen a su alumnado.

Esta valoración individualizada busca comprobar el grado de adquisición de la competencia en comunicación lingüística, de la competencia matemática y de las competencias básicas en ciencia y tecnología, así como el logro de los objetivos de la etapa.

El Departamento también ha criticado la inacción y falta de respuesta del Ministerio de Educación que, según el Ejecutivo, está provocando desconcierto en toda la comunidad educativa, a la vez que ha mostrado una vez más su rechazo a la Lomce, una ley "segregadora" y que "nació sin consenso", ha informado el Gobierno autonómico en un comunicado.

También ha insistido en que el Ministerio no ha sido capaz de atender el compromiso en tiempo y forma de convocar una conferencia sectorial que permitiera aclarar de forma efectiva las dificultades, dudas y problemas de la aplicación de la LOMCE y muy específicamente de la prueba de sexto de primaria.

Estas medidas han sido adoptadas en consenso con las comunidades autónomas de Asturias, Cantabria, Valencia, Baleares, Extremadura, Castilla la Mancha y Andalucía.