El Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) ha dado al Ayuntamiento de La Muela un mes, que termina el 4 de junio, para que proponga "soluciones concretas" al problema de la Unidad de Ejecución 8, donde la promoción de viviendas que está construyendo Naturaleza y Espacio (Nyesa) amenaza con invadir una vía pecuaria. No obstante, el organismo, dependiente del Departamento de Medio Ambiente que dirige Alfredo Boné, suspende en la misma resolución el plazo máximo que la ley le da para resolver el expediente.
La empresa critica que el ayuntamiento dificulte ahora la entrada en funcionamiento de servicios como la luz y el agua y asegura que los responsables del consistorio les aseguraron que no se trataba de una cañada sino de un camino vecinal.
La Asociación de Ganaderos de La Muela acepta como solución alternativa la habilitación de un nuevo trazado para la vía pecuaria, aunque con una condición: que mantenga las mismas dimensiones que la actual. "No vamos a permitir que los edificios entren en la vía", dijeron fuentes de la entidad.
Los ganaderos también destacan que el uso de un paso estrecho provocará problemas, ya que los rebaños --de más de un millar de ovejas en algunos casos-- invadirán los campos vecinos, para lo que reclaman la creación de un área de descanso. Tampoco se oponen al proyecto, aprobado en pleno, de construir un paso elevado sobre la autovía.
El Inaga anota que debe ser el ayuntamiento el que facilite los terrenos para poder adecuar el paso alternativo.
