Los regantes de la cuenca del Ebro se mostraron también partidarios del concepto de unidad de cuenca, atacando por ello el Real Decreto-Ley 12/2011. Para la Federación, este ha sido aprobado sin contar con la opinión del Consejo Nacional del Agua, el Consejo Asesor de Medio Ambiente. Su aprobación supone para ellos inseguridad, al depender de muchas administraciones los procedimientos administrativos.