Las instrucciones también incluyen casos en los que no exista patologías crónicas, pero que requieran que, de forma temporal, el alumno precise de medicación por vía oral y la familia no pueda acudir al centro. Así, se podrá solicitar que algún adulto asuma esa tarea, aunque la familia deberá presentar el informe médico que especifique la patología y el tratamiento, así como la medicación y la autorización paterna. Además, el protocolo también expone las pautas a seguir por el personal educativo en casos de accidente --incluyendo fracturas o desvanecimientos-- o crisis convulsivas sufridas por el escolar.