El jueves pasado Mallén se quedó sin médicos después de que los dos que trabajaban en su consultorio se marcharan de la localidad. La situación ha provocado mucho revuelo en el pueblo zaragozano, ya que la falta de facultativos parecía, en un principio, que se podía alargar en el tiempo. Si bien, el ayuntamiento informó ayer a sus vecinos de que «a mediados de esta semana» podrían llegar los nuevos médicos contratados.

«Mañana mismo volveremos a llamar para preguntar», explicó el alcalde de Mallén, Rubén Marco, que ha estado en contacto con la gerencia del sector sanitario tres, del que depende el centro de salud que gestiona el consultorio de esta localidad zaragozana.

Hasta el momento, las plazas se han cubierto gracias a las horas extra del coordinador del ambulatorio de Gallur, lo que resultaba incómodo tanto para los propios profesionales sanitarios, por la sobrecarga de trabajo, como para los vecinos, que temían quedarse sin servicio médico, cuestión que desde el ayuntamiento habían criticado ya. Para tratar de hacer presión, los vecinos de Mallén han impulsado una recogida de firmas, iniciada por el consultorio, para pedir la llegada de los facultativos. A día de ayer ya habían recogido más de 2.000, y eso que no habían comenzado la campaña física, sino que solo se podía firmar por internet.

Desde el Gobierno de Aragón explicaron ya la semana pasada que la marcha de los dos médicos de Mallén había sido una casualidad en el tiempo y que se debía resolver siguiendo los cauces administrativos normales. La partida de uno de los profesionales se debía a un concurso de traslados por lo que no se pudo evitar.