Las estaciones de esquí abren de nuevo con gran afluencia de público

Y por fin llegó el día. Tras un año, muy largo para los aficionados, miles de esquiadores han vuelto a deslizarse por un Pirineo aragonés engalanado para la ocasión. La meteorología, con precipitaciones abundantes, y el buen trabajo hecho durante las últimas semanas, han completado una puesta en escena ilusionante de cara a la recién estrenada campaña.

El único pero, si es que se puede poner alguno, son las bajas temperaturas que este fin de semana padece Aragón, ya que esquiar siempre es más agradable con algo de calor en el cuerpo. 

Muchos madrugadores han querido ser los primeros en estrenar las pistas, que lucen con una nieve en perfecto estado, según coinciden desde las diferentes estaciones. Casi 50 kilómetros de nieve esquiable han presentado Candanchú y Astún y ha rozado los 30 kilómetros Formigal. Cerler, Javalambre y Valdelinares quedan a la espera de encontrar el día en el que activar los telesillas. 

Candanchú no había abierto sus puertas y muchos deportistas ya esperaban impacientes para acceder a los 25 kilómetros esquiables con los que la estación ha dado el pistoletazo de salida a su temporada. «Hemos tenido bastantes precipitaciones pero el inicio es muy bueno», comentan los responsables del complejo deportivo, que al mediodía ya contabilizaban «unos 2.000 esquiadores» recorriendo las diferentes pistas de la estación. 

Una sensación que también comparten en Aramón, que sin querer precisar en los datos «hasta que podamos hacer balance de todo el puente», sí que tuvieron unas buenas sensaciones en el arranque de la jornada: «Al llegar a las estaciones se ha visto a mucha gente haciendo fila para entrar».

«Han venido muchas personas, no hemos llegado al lleno, pero es un buen arranque», cuentan desde Astún, donde lamentan «el frío, que ha frenado seguro a algunos esquiadores, pero esperamos que con el sol venga todavía más gente». 

Despegar en el puente

Aunque todas las estaciones comparten que el estreno fue muy positivo, sus principales responsables coinciden en que las mejores noticias para ellos llegarán a partir de este lunes, con el puente de la Constitución atravesando el primero de los dos bloquees en los que se divide, por la extraña distribución de los días laborales y festivos. 

«Creemos que va a ser un puente en el que todo vaya de menos a más, porque la gente seguro que tenía otros planes», comentan los gestores de Astún, en referencia a la tardanza de las distintas estaciones por confirmar su apertura. Algunas lo hicieron pasado el ecuador de esta semana. 

Pese a ello, «la calidad de la nieve, que es estupenda» sigue siendo el caballo de batalla para que los resultados se empiecen a notar con el paso de los días, «ya que creemos que a partir de mediados de la próxima semana empezarán a llegar los principales grupos de esquiadores».

En Aramón están más o menos igual, pero añaden que será fundamental la apertura de más pistas: «Queremos ir acumulando más espacio esquiable, porque con la cantidad de nieve que ya hay y las previsiones de que siga nevando será posible abrir más pistas en los próximos días». 

«La composición del puente nos asegura que vendrá gente durante toda la semana, esperamos que la meteorología acompañe para tener un arranque de campaña casi perfecto», concretan los responsables de Candanchú. 

Un tiempo que, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología, también va a hacer todo lo posible por que los aragoneses disfruten del esquí: temperaturas en ligero descenso, algunas nubes y precipitaciones en forma de nieve para redondear la primera semana deslizándose por el Pirineo aragonés. 

Suscríbete para seguir leyendo