Leonor, ante su semana grande como dama cadete en Zaragoza

Leonor de Borbón y Ortiz ya cuenta los días para asumir galones y protagonizar como dama cadete una de esas semanas grandes e inherente a su condición de heredera al trono del Reino de España. Primero se presentará este viernes ante la Virgen del Pilar como parte de la tradicional ofrenda en la Basílica y el sábado jurará bandera en un acto de «máxima normalidad» que el general director de la Academia General Militar de Zaragoza, Manuel Pérez López, se encargó este lunes de presentar –«es una jura normal», reiteró– junto a la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles –«no se va hacer nada especial», añadió esta–, quien se desplazó hasta la capital aragonesa para escenificar los pormenores de la ceremonia. La Princesa de Asturias refrendará su compromiso castrense con la sociedad española junto a unos 400 compañeros de la LXXXIII promoción en una ceremonia de una hora y veinte minutos de duración que contará con la presencia del rey Felipe VI y la reina Letizia.

A nivel institucional será la misma ministra quien ejerza de representante del Gobierno de España en funciones a diferencia de lo que sucediera durante la jura de bandera del actual monarca el 11 de octubre de 1985, cuando el propio presidente del Ejecutivo nacional por entonces, el también socialista Felipe González, se encargó de liderar la comitiva. En esta ocasión también participará el Jefe del Estado Mayor de Defensa, Teodoro Esteban López, tal y como adelantó Robles en las instalaciones militares de Zaragoza. «Desde el principio hemos querido que la formación de la Princesa de Asturias entre dentro de la máxima normalidad. No va a ser una jura individualizada como fue con Su Majestad el Rey y vamos a darle toda la máxima normalidad», manifestó la titular de la cartera de Defensa.

En esa «normalidad» había insistido antes el director de la Academia, quien adelantó que el diseño de la jura de bandera va a ser «el mismo del año pasado». A los honores, la revista a las unidades armadas y el saludo a las autoridades se sumará el juramento «común para todos»: un pase individual por la bandera de España de cada uno de los cadetes –«con un beso simbolizarán el compromiso que han adquirido», detalló–, el desfile de a tres bajo el arco formado por la bandera y el sable, el acto de homenaje a los caídos, una alocución del propio Pérez López y la interpretación del himno de la Academia.

A los aproximadamente 410 cadetes que jurarán bandera se podrían sumar 2.000 asistentes entre familiares y allegados –se han facilitado cuatro invitaciones por cadete para los asientos de tribuna y otras dos invitaciones para la zona de ventanas–, personal de protocolo y autoridades. «Se cubrirá todo el aforo», aventuró el director, quien también expresó su alivio por la ligera bajada de temperaturas prevista para este sábado. A las circunstancias meteorológicas aludió también Pérez López cuando explicó a la ministra que el plan de estudios se estaba completando «con total normalidad» a pesar de ciertos episodios como la ola de calor de finales de agosto y la DANA de mediados de septiembre.

"Esa formación en valores como el compañerismo y el liderazgo es esencial para la Princesa de Asturias y para cualquiera que aspira a llevar un uniforme de las Fuerzas Armadas"

Margarita Robles

— Ministra de Defensa

Con todo ello, Leonor ha podido desarrollar todas las actividades «sin ninguna novedad» y, desde su ingreso en la Academia el pasado 17 de agosto, está «perfectamente integrada con sus compañeros». «Es muy importante que quien va a ser la jefa suprema de las Fuerzas Armadas, esté aquí con sus compañeros», añadió la ministra de Defensa, quien no escatimó en ensalzar los valores castrenses que está recibiendo la dama cadete Borbón. «Esta academia no solo forma militarmente, sino que forma en lo que es esencial y fundamental: forma en valores y esa formación en valores como el compañerismo y el liderazgo es esencial para la Princesa de Asturias y para cualquiera que aspira a llevar un uniforme de las Fuerzas Armadas», justificó Robles, refiriéndose a este centro de enseñanza del Ejército de Tierra como «un lujo de formación y preparación».

La Academia General Militar de Zaragoza, el bastión instructor de la vida castrense de Leonor

La ministra quiso conocer de primera mano los ejercicios de formación física que los alumnos llevaban a cabo en el Campo de Deportes Alcázar de Toledo, donde incluso intercambió palabras con un grupo de chicas –«estamos muy contentas, ministra; si se quiere se puede», le dijeron– y otro de chicos a quienes le deseó «mucha suerte» en su carrera por «seguir dejando tan alto el pabellón español». Los citados ejercicios fueron presentados por el teniente coronel y jefe del departamento de formación física, Alfonso Dieste, quien les indicó que estas sesiones constaban de 20 minutos de calentamiento, 40 de desarrollo de la actividad, 10 de estiramientos y 5 de recordatorio. De ellos forma parte la propia Leonor, quien compagina este tipo de ejercicios con asignaturas teóricas de primer y segundo curso y las de su especialidad del Cuerpo de Infantería.