EL FUTURO DEL AUTOMÓVIL

Las ayudas a otras gigafactorías: Seat logró 190 millones para Valencia

La gigafactoría de Stellantis en tierras aragonesas ha recibido un volumen de ayudas en el marco del Perte de Vehículo Eléctrico y Conectado (VEC) muy inferior a las asignaciones logradas por otros proyectos similares

Terrenos donde se instala la gigafactoría en Sagunto.

Terrenos donde se instala la gigafactoría en Sagunto. / EFE

La gigafactoría que promueve el grupo Stellantis en tierras aragonesas –en la localidad de Figueruelas, donde ya tiene la fábrica de coches–ha recibido un volumen de ayudas en el marco del Perte de Vehículo Eléctrico y Conectado (VEC) muy inferior a las asignaciones logradas por otros proyectos similares. De ahí, el malestar en la compañía, que anunció la presentación de alegaciones para lograr la cantidad solicitada.

En concreto, la multinacional que capitanea Carlos Tavares se le ha adjudicado provisionalmente 53,3 millones de euros para esta iniciativa. La china Envision ha logrado fondos casi seis veces mayores al hacerse con 300 millones en la misma convocatoria de la segunda edición del programa de incentivos públicos, que se financia con los fondos europeos de reconstrucción.

También es notablemente mayor el apoyo recibido por el grupo Volkswagen para la gigafactoría que impulsa en Sagunto (Valencia), el primer proyecto de este tipo que se promovió en España, que estuvo a punto de venirse a Zaragoza, pero el inversor se decantó finalmente por la región levantina.

En este caso, la matriz de Seat se hizo con 100 millones en la primera convocatoria del Perte VEC, lo que hizo que se planteara cancelar el año pasado la inversión valenciana por considerar la escasa asignación recibida de estos fondos que suponía la mitad de lo que había solicitado para levantar la planta. El Gobierno finalmente le concedió otros 90 millones de euros con otra partida de ayudas públicas para que siguiera adelante. 

Volkswagen puso como condición desde el inicio de la negociación que las ayudas públicas fueran como mínimo de 200 millones de euros. A cambio se comprometía a invertir más de 2.800 millones de euros para una planta con una capacidad de 40 gigavatios/hora al año (800.000 baterías) y la creación de más de 3.000 puestos de trabajo directos. La multinacional, que siempre condicionó el proyecto a las ayudas públicas, se plantó y el Ejecutivo logró finalmente salvar la gigafactoría de Sagunto tras ofrecer otra ayuda directa de 90 millones.