El invierno está asociado inevitablemente al frío. Y aunque sí que es verdad que en muchas zonas de España poco conocen el frío de verdad, en Aragón no tenemos esa suerte y sí que tenemos que aguantar las bajas temperaturas, las heladas que no nos dejan ni conducir el coche, la nieve y, en general, el frío.

Hay varias formas de combatir el frío. En la calle, poco más se puede hacer que ponernos capas y capas de ropa para mantener el cuerpo en calor y que no nos cale el frío hasta los huesos, pero afortunadamente en casa tenemos otras opciones.

Por supuesto, si te abrigas bien en el hogar no te hará falta ni poner la calefacción, pero esa opción no se contempla. Otra alternativa son los calefactores o estufas eléctricas o incluso de leña o pellets (en función del tipo de casa), pero lo más habitual es tener calefacción y un termostato que regule la temperatura. ¿Pero cuál es la ideal? ¿Qué factores influyen en que una sea más adecuada que otra? ¿Cómo hacerlo sin que la factura se dispare, que en estos tiempos que corren es muy fácil que suceda?

El intervalo

De primeras hay que diferenciar entre dos factores. Uno, la hora del día que es, es decir, si es de noche o no. Y segundo, si estamos en casa o no. Por la noche, como estaremos durmiendo y tenemos mucha ropa de abrigo en la cama, no merece la pena ponerla alta, lo mismo que si vamos a estar fuera.

Por eso, en esos casos, según explicó el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), lo ideal es que esté en un intervalo de entre 15 y 17ºC. Y en cuando a la temperatura durante el día si estamos en casa, con que esté entre 20 y 21ºC bastará para calentar lo suficiente y que no se dispare la factura.

Otros factores

Ahora bien, hay que tener en cuenta otras circunstancias. Por ejemplo, qué capacidad aislante tiene la casa, porque en ese caso se necesitará más o menos temperatura para conseguir el mismo efecto. También la humedad tiene su incidencia y, por supuesto, hay que tener un especial cuidado si hay bebés en casa, porque en su caso hay que elevar un poco la temperatura hasta unos 22 o 24ºC por el día y 18-20 por la noche.