Los Bomberos de Zaragoza ya están en Marruecos: "Vamos a 'batirnos el cobre' con esta situación"

El operativo de ocho expertos rescatistas y sanitarios del cuerpo de Bomberos de Zaragoza ya está en Marruecos. Este lunes, a las 8.15 de la mañana, han embarcado en el puerto de Algeciras en un ferry que les ha llevado hasta Tánger.

Los Bomberos de Zaragoza desplazados a Marruecos llegaron sobre las 21.00 horas a la región de Amizmiz, uno de los lugares más afectados por el terremoto de magnitud 6,8 que sacudió el país en la noche del viernes.

Después de 25 horas de viaje, el operativo compuesto por ocho efectivos, entre ellos médicos, bomberos y guías caninos, han llegado a la zona afectada por el terremoto para iniciar cuanto antes los trabajos de salvamento de supervivientes y atención a heridos, explicó el cuerpo.

Protección Civil de Marruecos, que está coordinando la ayuda internacional, los ha destinado a la zona de Amizmiz, a unos 60 kilómetros de Marrakech, donde se encuentra desplegado también la Unidad Militar de Emergencias (UME). Se trata de una zona montañosa con aldeas aisladas de difícil acceso, a los que se tendrá que llegar a pie.

Quique Mur, jefe de expedición, explicó que "pronto por la mañana, lo antes posible, nos dirigiremos con los vehículos hasta donde se corten las carreteras y ya iremos a pie a, si se me permite la expresión, 'batirnos el cobre' con esta situación".

Los ocho efectivos, entre los que hay dos médicos, y los dos perros especializados en el rescate de personas partieron este domingo de Zaragoza a las 20.00 y han estado en la carretera toda la noche para llegar hasta Algeciras. Han decidido viajar en sus propios vehículos para evitar consumir recursos del país vecino y conseguir ser así más autónomos y desplazarse por su cuenta allí donde sea necesario.

"Llevamos vehículos 4x4 y nuestra intención es llegar a estas zonas menos exploradas buscando la posibilidad de rescatar a gente pero también de atender a personas heridas que no hayan podido ser desplazadas", ha dicho Mur.

Los dos perros que acompañan a la expedición son los mismos que ya se desplazaron hasta Turquía después del terremoto que tuvo lugar en enero y que dejó decenas de miles de muertos.

Los bomberos llevan dos contenedores con ayuda médica, uno para atender lesiones traumatológicas y otro de medicina general. "Las emergencias son muy complicadas y en una decisión de ir a un sitio a otro se dan muchas circunstancias", ha zanjado Mur.