Llegará algún conductor y dirá: "Eso ya lo hacen ahora". Y no le faltará razón. En muchos tramos dela red viaria española es habitual ver a motoristas corriendo por los arcenes cuando hay retenciones. Lo hacen, sí; y lo hacen aun a sabiendas de que es ilegal. Aunque lo será hasta dentro de poco, y esa será la diferencia, porque la Dirección General de Tráfico (DGT) ha pactado con los motoristas introducir una serie de modificaciones en el reglamento general de circulación que permitirán, siempre que la seguridad quede garantizada, efectuar estas maniobras y otras que también están muy implantadas pese a que algunas aún acarrean una multa para quien las lleva a cabo actualmente.

La Asociación Mutua Motera (AMM), plataforma que ha impulsado y reclamado la mayoría de las reformas normativas, afirma tener el compromiso de la DGT de que estas se aplicarán "antes de que acabe el año". El director del área de seguridad vial de la entidad, Juan Carlos Toribio, explica que Tráfico se lo confirmó en una reunión mantenida el 20 de julio y muestra su deseo de que se plasme negro sobre blanco a principios de septiembre. Sería la manera de evitarse sorpresas habida cuenta que el 20 de noviembre hay elecciones y un probable cambio de Gobierno podría frenar algunas medidas. "Sería difícil, aunque se podría variar. No obstante, se trata de un plan que favorece la seguridad, promociona el uso de la motocicleta y por eso no tendría por qué bloquearse", argumenta.

Varios cambios que está previsto que se introduzcan en la reglamentación vendrán a legalizar actuaciones que tanto conductores como administraciones ya efectúan, pero al margen de la ley. El caso de circular por el arcén es un claro ejemplo. Según las normas vigentes, por estas zonas solo pueden ir (y no en todos los tipos de vía) las bicicletas, los ciclomotores, los vehículos agrícolas o industriales y aquellos que estén averiados. Con las modificaciones planteadas, todas las motos, sean de la cilindrada que sean, podrán moverse por este espacio cuando haya un atasco, un comportamiento que en estos momentos se sanciona con una multa que ronda los 150 euros.

Será, por tanto, una maniobra alternativa y limitada a ciertas circunstancias: el arcén deberá ser transitable, tanto por el ancho como por la limpieza, y la conducción se tendrá que hacer con el mayor tiento posible. "Por eso, como comentó en la reunión del 20 de julio el subdirector de normativa y recursos de la DGT, Ramón Ledesma, la intención es que no se pueda ir a más de 30 kilómetros por hora", asegura el representante de la AMM.

Los motoristas también han pactado con Tráfico que se "proporcione cobertura legal" a las zonas denominadas avanza motos. Se trata de esas parrillas de color amarillo pintadas en el asfalto y acompañadas del dibujo de una moto que están situadas en los cruces de algunas ciudades. "La intención es que estos espacios queden reflejados en el catálogo de señales --explica Toribio--, porque ahora puede darse el caso de que un coche se pare allí y la policía no pueda decirle nada porque esa señalización no está reglamentada". La medida, una vez aprobada, irá acompañada de la autorización de las "maniobras de filtrado". Es decir, los zigzagueos que hacen los motoristas para llegar a la zona de delante del carril no serán sancionados, pero estos deberán hacerse cuando el tráfico esté parado, entre otros requisitos que quedan por concretar por la DGT.

Como sucede en las zonas solo para motos --cuyo éxito se ha demostrado por ejemplo en Barcelona con una reducción de los accidentes de motos de entre el 11% y el 20% en las calles que incluyen estas parrillas, según un informe municipal--, los pasos de peatones que solo aparecen marcados con pequeños cuadros de pintura blanca en lugar de los grandes rectángulos tradicionales "tampoco son legales porque no están incluidos en el catálogo de señales", advierte Toribio. La reforma del reglamento pondrá fin a esta situación e incluirá esa alternativa, que muchos municipios ya aplican porque evita muchos resbalones, sobre todo cuando llueve, tanto de motos como de peatones.

Los auriculares y altavoces integrados en el casco (no los del MP3 o la radio) también serán legalizados si cumplen una serie de requisitos. De esta manera, según la AMM, se facilitará la orientación con el GPS, el uso de telefonía móvil (serán el manos libres de las motos) y a la vez se podrán utilizar intercomunicadores con el pasajero para mejorar la comunicación. A esto se añadirá que se podrán emplear tapones de protección auditiva, aunque la Asociación Mutua Motera es partidaria de que solo se puedan utilizar en carretera y no en casco urbano. "En autovías y autopistas los motoristas podemos llegar a soportar más ruidos de más de 130 decibelios, cuando la Organización Mundial de la Salud indica que a partir de 75 decibelios ya hay riesgo de lesión acústica", se justifica Toribio.

Para mejorar la seguridad, el reglamento también pasará a considerar ilegales los cascos certificados para ciclomotores (los que son parecidos a los que llevan los ciclistas). También se eliminará la exención de llevar casco por motivos de salud. Actualmente, un motorista puede evitar ponerse esta protección si presenta un certificado médico que indica que sufre dermatitis o ataques de ansiedad si se lo pone. Con la reforma normativa, quien no pueda llevar casco no podrá llevar moto.