El túnel de Bielsa abrió ayer en los dos sentidos de circulación a pesar de que el lado español aún no ha llegado a un acuerdo para instalar los bomberos que se exigen en el plan de seguridad de este paso fronterizo. La prefectura de Tarbes, responsable de garantizar la apertura de esta vía, la autorizó ayer con condiciones y de forma provisional a la espera de que el Gobierno de Aragón alcance un acuerdo que permita disponer de vigilancia en el túnel, como sí ha cumplido el lado francés. De momento, y a la espera de un acuerdo, el doble sentido será de ocho de la mañana a diez de la noche y la limitación de velocidad a 50 kilómetros por hora.

El sentido bidireccional del túnel debía haberse puesto en marcha el pasado lunes, aunque la falta de acuerdo entre la DGA y el personal que debe velar por la seguridad hizo que el primer día no se pudiera poner en marcha. Aunque el Ejecutivo autonómico aún no ha resuelto este problema, decidió poner en marcha el doble sentido, mientras trata de buscar una solución --que no se ha alcanzado por problemas económicos-- para contratar bomberos. Estas medidas podrían ser la compensación dineraria a bomberos voluntarios de la comarca, que deberían dejar su empleo para atender el túnel, o una empresa privada.

Por su parte, el grupo del PSOE en las Cortes de Aragón instó ayer al consejero de Obras Públicas del Ejecutivo autónomo, Rafael Fernández de Alarcón, para conseguir que el túnel sea bidireccional de forma permanente. El portavoz socialista en la comisión de Obras Públicas, José Ramón Ibáñez, lamentó en un comunicado la "falta de diligencia" del titular del Obras Públicas en Aragón.

Ibáñez responsabilizó al Gobierno aragonés de "retrasar" proyectos de interés para el desarrollo de la comarca del Sobrarbe, donde se ubica el túnel de Bielsa, como el mantenimiento de la carretera A-138, el enlace con Piau-Engaly, el plan de eficiencia energética o las alternativas al túnel Balupor-Fiscal.