El bono social eléctrico llega a 5.000 aragoneses más en el último año

El número de beneficiarios del bono social eléctrico, que actualmente permite acogerse a descuentos de entre el 65% y el 80% en la factura de la luz a los consumidores que se consideran vulnerables, ha ganado 5.020 beneficiarios en Aragón en el último año. En estos momentos hay un total de 35.931 hogares de la comunidad (26.327 en Zaragoza, 5.498 en Huesca y 4.106 en Teruel) que gozan de esta tarifa rebajada, según los datos facilitados a este diario por el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico. Cerca de un tercio de estos suministros domésticos pertenecen a familias numerosas. La cifra sigue siendo baja a ojos de las asociaciones de consumidores y entidades sociales, que estiman que muchos se los que sufren pobreza energética se quedan fuera de la ayuda, bien por desconocimiento o por el farragoso papeleo que se exige para solicitarla.

Garamendi, en Zaragoza, cree que no cobra el bono social térmico

Quienes tienen reconocida esta ayuda se benefician de forma automática del bono social térmico, un pago único que cobraron este invierno 29.000 aragoneses. El importe en este caso oscila entre los 260 y los 800 euros en función del grado de vulnerabilidad social de las familias receptoras y la zona climática de la vivienda.

En cuanto al bono eléctrico, los beneficiarios se han incrementado un 16% respecto a los que había al cierre del año 2021. No obstante, la cifra sigue estando por debajo de la que se registraba en abril de 2020, pocas semanas después del estallido del coronavirus, cuando eran 37.347.

El repunte es lógico teniendo en cuenta los precios récord que ha alcanzado la electricidad a lo largo de 2022 para disgusto de las familias y empresas, que han tenido que pagar un sobrecoste considerable por este servicio básico. Además, hay que tener en cuenta que el Gobierno de Pedro Sánchez flexibilizó hace un año los requisitos para acceder al bono social. La fórmula para llegar a más gente fue elevar los umbrales de ingresos máximos para poder acceder a la subvención. El baremo mínimo pasó de 1,5 veces el IPREM y a 0,5 veces el índice.

El objetivo de extender el perímetro de la ayuda se ha cumplido en parte en Aragón pero no ha dado los frutos deseados a nivel nacional. Apenas ha crecido el número de hogares con bono social eléctrico. Tan solo hay unos 3a.000 más: de 1.218.000 que lo tenían al finalizar 2021 a 1.215.662 un año después. El Gobierno esperaba incrementar en 600.000 los perceptores en todo el país.

Criterios de concesión

El ministerio no ha ofrecido datos desagregados en los diferentes perfiles y criterios que se contemplan para la concesión del bono social, pero sí Endesa, que representa al 90% de los beneficiarios de la ayuda que hay en Aragón a través de su comercializadora del mercado regulado (Energía XXI). Estar en este régimen, el que la conocida como tarifa de último recurso (TUR) en el que operan un total de ocho empresas de referencia, es una condición imprescindible para optar a la ayuda.

La eléctrica líder en este territorio cuenta 32.744 clientes en la comunidad adheridos al bono social, según los datos a 27 de enero facilitados por la compañía, frente a los 26.935 que tenía hace casi un año. Esto supone que hay 5.809 hogares más –un incremento del 21,6%– que cuentan con esta protección social.

De ellos, 14.482 son consumidores vulnerables y 18.262 vulnerables severos. En cuanto al criterio para la concesión de la ayuda, la mayoría la tienen por un bajo nivel de renta. En concreto, 21.063 consumidores, el 64,2% del total. El segundo colectivo más numeroso que se beneficia del descuento en la factura eléctrica es de las familias numerosas, con 9.457 hogares acogidos (el 28,8%), de los que 6.146 son catalogados como vulnerables y 3.311 vulnerables severos.

Para este perfil de perceptores no importa el nivel de renta, lo que ha sido motivo de polémica esta semana al conocerse que varios políticos de la Comunidad de Madrid están acogidos a la ayuda por esta vía, como el vicepresidente del Gobierno regional, Enrique Ossorio (PP), o la líder de Más Madrid, Mónica García. A raíz de estos casos, el Ministerio para la Transición Ecológica ha decidido tomar cartas en el asunto e fijar un nivel máximo de ingresos a este colectivo. En Aragón hay actualmente 20.000 familias aragonesas, de las que en torno a la mitad se benefician del bono social eléctrico.

Según los datos de Endesa, también cuentan con la bonificación 2.042 pensionistas y 209 perceptores del ingreso mínimo vital.

Los últimos datos publicados por el INE señalan que la pobreza energética –quienes no pueden permitirse tener la vivienda con una temperatura adecuada– afectaba al 8,5% de los aragoneses en 2021, el triple que en 2020 (2,8%), pero la tercera cifra más baja del conjunto de España.

Polémicas por las familias numerosas

El Gobierno prepara una reforma de los requisitos para obtener el bono social eléctrico (rebajas en la factura destinadas a familias vulnerables) y el bono social térmico (un cheque ayuda para pagar parte de los gastos de gas, agua y calefacción de estas familias) para que lo dejen de recibir algunos hogares que realmente no necesitan estas ayudas.

El objetivo del Ministerio para la Transición Ecológica es establecer a partir de ahora requisitos de renta máxima por hogar para acceder a los bonos sociales también a las familias numerosas (las que tienen tres o más hijos), que hasta ahora se consideran directamente beneficiarios de las ayudas con independencia de sus ingresos.

Una medida anunciada ahora por el Ejecutivo tras la polémica desatada tras conocerse que el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, la líder autonómica de Más Madrid, Mónica García, y otros políticos regionales madrileños están percibiendo los bonos sociales de luz y térmico por su condición de familias numerosas.

El Gobierno ha lanzado, en cualquier caso, un mensaje de tranquilidad a las familias numerosas. La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha anunciado que –por las particularidades de este tipo de unidades familiares y por el gran número de convivientes que pueden conllevar– podrán mantener los bonos sociales de luz y de gas con niveles de renta «mucho más elevados» que los que se requieren para ser considerado consumidor vulnerable o vulnerable severo. Los márgenes de renta serán así más elevados que los del resto de categorías.