La nueva residencia de Pontoneros "huele a nuevo"

El lunes comienza la universidad y las calles de Zaragoza ya ha comenzado a llenarse de nuevos estudiantes. Este viernes llegaron los primeros universitarios a la residencia de Pontoneros, que ha logrado abrir sus puertas con el tiempo justo.

"Huele a pintura", asegura Paula justo al entrar por la puerta de esta especie de colegio mayor. La joven sevillana se mostraba ilusionada caminando por los blancos pasillos del que será su hogar los próximos meses. Estará todo el año en la ciudad disfrutando del SICUE (un programa de movilidad de estudiantes en España), por ello decidió que la mejor opción era irse a una residencia. "Todo el mundo me decía que tenía que vivir la experiencia de estar en una", menciona la joven, que el lunes comenzará sus estudios de Trabajo Social en la Universidad de Zaragoza.

La residencia Pontoneros de Zaragoza ya está lista para recibir estudiantes

Al llegar a la segunda planta, Paula se para frente a la habitación 211. Al abrir la puerta y encender la luz, decepcionada exclamaba: "¡En las fotos parecía más grande!". A pesar del chasco inicial, la sevillana comienza a deshacer las maletas y a colocar las primeras decoraciones en busca de algo de color.

El blanco es el tono estrella en la gama de colores que domina en la nueva residencia a la que todavía le faltan los últimos retoques. "La zona de lavandería aún no está finiquitada", explica el padre de Julen Riud mientras espera con su hijo a ser atendido en recepción. Para el joven navarro, la residencia Pontoneros fue la única opción que le quedaba, porque "me puse a mirar sitios tarde y la mayoría estaban cogidos". Aún así, Julen y su padre están más que satisfechos con el edificio que "se ve muy nuevo y el precio está muy bien".

Hasta el 6 de septiembre se quedará este joven estudiante de Farmacia, después volverá a Pamplona unos días "hasta empezar en la San Jorge el día 14". Los primeros días Julen aprovechará para conocer la ciudad y hacer los primeros amigos con los que disfrutará su primer año como universitario.

Al igual que Paula, la mejor opción para el navarro siempre fue la de una residencia porque "todavía no conozco a nadie". Aunque, según su padre, todavía tiene que "madurar un poco antes de vivir solo en un piso".

Mientras tanto, saliendo de Pontoneros con la maleta ya vacía, Eduardo Saniz vuelve a Logroño el fin de semana con sus padres. Él empieza Matemáticas en la Facultad de Ciencias en el Campus de San Francisco y, de momento, va a aprovechar para conocer la zona donde vivirá estos meses: "Ahora vamos hacia el Caracol a sacarme la tarjeta para ir en autobús a la universidad".

Sobre el que será su nuevo hogar, sus padres están más que "satisfechos" con Pontoneros. Así lo aseguraba la madre de Eduardo: "Entras y huele todo a nuevo". Además, en relación a la calidad precio, la familia está sorprendida porque "la residencia en la que estudió mi hijo mayor en Salamanca no estaba tan bien y, además, era mucho más cara", asegura el padre del riojano.

Como Paula, Julen y Eduardo, muchos jóvenes comienzan sus primeros días como universitarios en los pasillos de Pontoneros. La residencia será su casa, por lo menos, hasta que finalice el curso académico que está por venir.