PRECIPITACIONES

La Aemet llama a la prudencia y descarta "una nueva Filomena" en las posibles nevadas

Los cambios en las cotas no permiten hacer previsiones a medio plazo y el organismo meteorológico rebaja la tensión originada en los últimos días por algunas instituciones

La borrasca Filomena dejó un manto blanco en Zaragoza en enero de 2021.

La borrasca Filomena dejó un manto blanco en Zaragoza en enero de 2021. / ÁNGEL DE CASTRO

S. H. V.

La previsión de las primeras nevadas en Aragón lejos de las estaciones de esquí desató algunas alarmas que la Aemet prefiere desactivar, llamando a la calma y eliminando «la alerta» que considera que se ha iniciado en las últimas horas.

«No va a ser una Filomena ni se va a dar una situación parecida», aseguraba este lunes a este diario Rafael Requena, delegado de la Agencia Estatal de Meteorología en Aragón, insistiendo en que «el miércoles y el jueves sí que puede caer algo de nieve en cotas menores». Por ahora, las previsiones son algo vagas ya que «todo cambia cada doce horas, por lo que no se puede hacer una estimación certera de lo que va a ocurrir».

La única seguridad es que la nieve volverá a caer en el Pirineo y en las zonas más altas de Teruel, por lo que «el sector de la nieve volverá a estar contento con lo que se les viene en las próximas horas». Requena certificó que la nieve llegará a cotas cercanas a los 1.200 metros, «por lo que a las estaciones aragonesas seguro que les pilla», pero no aseguró las nevadas en cotas más bajas: «Puede que lleguemos a verlo, pero aún es pronto para saber qué va a suceder».

En lo que sí insiste el responsable de la Aemet en la comunidad es en rebajar la alerta que se ha originado en las últimas horas y que ha hecho que algunas instituciones, como el Ayuntamiento de La Muela, pidan hacer acopio de víveres para el final de la semana: «Ni hay que hacerlo ni va a suceder ninguna locura, por lo que no hay que exagerar la situación». Hoy la incertidumbre se fija en que a partir de 500 metros «solo caerá agua», por lo que todavía no se puede saber «la ubicación, la cantidad o la cota de nieve».

Mientras la mirada se dirige al cielo para saber si llegarán los primeros copos a las ciudades aragonesas, las precipitaciones dan un respiro a los embalses de la comunidad. Los pantanos tienen hoy 4.831 hm3 de agua, encontrándose al 61,9% de su capacidad. En estas mismas fechas, el año pasado apenas registraban 3.534 hm3, llenando solo el 45,3% de su capacidad. Pese a la mejora, Aragón se encuentra un par de puntos por debajo de la media de los últimos cinco años, que se sitúa en los 5.007 hm3, el 64,2%.