Le roban el móvil y clava al ladrón un sacacorchos en Zaragoza

Eran las 7.00 horas de la mañana del sábado cuando unos gritos interrumpieron el sueño de los vecinos de Parque Roma, en Zaragoza. Un joven de 22 años, de nacionalidad gambiana y que responde a las iniciales S. B., había sido atacado por la espalda con un sacacorchos por un hombre dominicano de 41 años, J. M. R. H., produciéndole dos pequeñas heridas. Tras una llamada a la Policía Nacional por parte de un testigo de lo sucedido, los dos, que cuentan con antecedentes, fueron detenidos.

Al parecer, antes del ataque el joven le había asaltado a J. M. R. H., representado por los abogados Carmen Sánchez Herrero y Luis Ángel Marcén, y le había sustraído el teléfono móvil, lo que habría motivado el suceso posterior.

Fue un ciudadano que estaba paseando a sus perros el que se encontró primero al atacante del joven, que portaba un neceser en la mano y que andaba nervioso y jadeante. Acto seguido, vio cómo un hombre salía de la urbanización de Parque Roma gritando «¡el sudamericano, el sudamericano!».

Entonces, este testigo se encontró al joven en el suelo, con dos pequeñas heridas en la espalda, por lo que llamaron a una ambulancia. Los sanitarios le asistieron en el sitio y después lo trasladaron al hospital Clínico Lozano Blesa.

Cuando fue preguntado sobre lo ocurrido, el joven gambiano manifestó que el otro hombre detenido se le había acercado por la espalda y, tras pincharle con un objeto punzante, aprovechó que caía al suelo para quitarle dos teléfonos móviles, que la Policía posteriormente requisó.

Mientras S. B. estaba siendo atendido por la ambulancia, la Policía dio con el hombre dominicano, que llevaba restos de sangre en una de sus manos y en el labio. Además, portaba un neceser con un sacacorchos y dos teléfonos móviles en la otra mano.

Entonces, este hombre reconoció que había atacado al joven porque este, previamente, acompañado por otro hombre, le habían asaltado y quitado el móvil, una versión que coincide con otro testigo de los hechos. Por todo ello, ambos fueron detenidos, si bien los dos han quedado el libertad. La Policía también requisó un cuchillo de 20 centímetros de filo.