Prevenir la soledad no deseada

El fenómeno de la soledad es una realidad que en los últimos años recibe una mayor atención por parte de la sociedad. Es importante distinguir entre estar solo y sentirse solo.

Estar solo es una situación objetiva de falta de compañía, mientras que sentirse solo es una experiencia subjetiva de aislamiento emocional. La soledad no deseada implica efectos negativos en la salud mental, emocional y física de una persona.

El origen de la soledad no deseada puede deberse a diversas razones, como la falta de relaciones sociales, la pérdida de seres queridos, cambios en la vida que conduzcan a la separación de amigos o familiares o dificultades para conectarse con los demás debido a factores de salud mental o limitaciones físicas. Es necesario reconocer y abordar la soledad no deseada para mejorar el bienestar emocional y buscar formas de conectarse con otras personas y construir relaciones significativas.

Se estima que, en al menos en 600 hogares del barrio de Las Fuentes, las personas mayores se perciben a sí mismas como víctimas de la soledad no deseada, evidenciando un problema social que requiere atención inmediata y estrategias comunitarias integradas para su mitigación. En los últimos años, se viene notando un incremento significativo en los hogares unipersonales encabezados por personas mayores de 65 años, sobre todo formados por mujeres viudas, cuyos hijos se han establecido en otros barrios nuevos con población más joven o incluso en poblaciones rurales muy cercanas a la ciudad.

El último dato obtenido en relación con los hogares del barrio de Las Fuentes resulta en que un 31,45% está compuesto por una sola persona. De estos, 2.627 son mayores de 65 años, y 626, a su vez, lo son de 85 o más años. El porcentaje de hogares con mayores que viven solos es en este distrito algo más alto que en el conjunto de Zaragoza.

La Fundación El Tranvía tiene una larga trayectoria en la implementación de programas y servicios destinados a mejorar la calidad de vida de las personas en situación de vulnerabilidad, incluidas las personas mayores que pueden experimentar soledad no deseada. Dada la realidad del entorno en el que se encuentra ubicada la entidad, se vio como una oportunidad la realización de la formación ‘Intervención y prevención de la soledad en personas mayores usuarias de servicios de atención sociosanitaria’, ofertada dentro de la convocatoria de cursos del Inaem. Se identificaba, de esta manera, la soledad no deseada entre las personas mayores como una necesidad significativa dentro de la comunidad del barrio de Las Fuentes.

La finalidad del curso es poner en marcha acciones para la detección, prevención y tratamiento de la soledad en las personas mayores usuarias de los servicios de atención sociosanitaria. El impacto esperado puede ser considerable, no solo en términos de mejorar el bienestar de las personas mayores en el barrio de Las Fuentes, sino también en la creación de un modelo de cuidado más holístico que puede inspirar a otras comunidades y entidades a adoptar enfoques similares.