DECLARADO BIEN DE INTERÉS CULTURAL

El ‘Tota Pulchra’ atrae a cientos de oscenses a la catedral

Asistieron representantes del IES Ramón y Cajal, cabildo y consistorio

La orquesta durante la celebración del ‘Tota Pulchra’ en la catedral de Huesca.  | DIÓCESIS DE HUESCA

La orquesta durante la celebración del ‘Tota Pulchra’ en la catedral de Huesca. | DIÓCESIS DE HUESCA / la crónica cronicas@aragon.elperiodico.com

La Crónica

La catedral de Huesca acogió un siete de diciembre más la celebración del Tota Pulchra, acto litúrgico que, como cada víspera de la festividad de la Inmaculada Concepción de María, llenó el templo de asistentes a una tradición que viene desarrollándose desde el siglo XVII y que está declarada Bien de Interés Cultural.

El acto estuvo presidido por el administrador diocesano, Julián Ruiz Martorell, y a él asistieron el cabildo catedralicio, representantes de la corporación municipal de la ciudad de Huesca y el claustro de profesores del IES Ramón y Cajal, centro heredero de la antigua Universidad Sertoriana de Huesca que se vio obligada a desaparecer en 1845 tras la aprobación de un nuevo Plan General de Estudios.

Actuaron para tal evento Marina Lansac, voz que dio vida a las canciones, junto el coro de la capilla de música de la catedral de Huesca y una orquesta, reunión de diferentes músicos de la capital altoaragonesa de Huesca unidos para la ocasión bajo la batuta de José Vicente Pardo Bellido, profesor de orquesta y coro del conservatorio de Huesca. Detrás del libreto se encontraba la maestría del compositor italiano Giovanni Cesare Aldega.

Esta ceremonia trae causa del voto realizado por las instituciones de la época en 1450 a causa de una epidemia de peste que asoló la ciudad. La tradición marca que un coro y una orquesta interpreten algunos himnos litúrgicos, entre ellos el Tota Pulchra es, María.

En dicha ceremonia, se incorpora un ritual específico en cuanto a procedimiento, usos, intervenciones musicales y de patrimonio mueble, renovado y adaptado al paso del tiempo.

La devoción de la Inmaculada Concepción es una de las celebraciones más arraigadas en Aragón y tiene su origen en el dogma según el cual, la Virgen María habría sido concebida sin pecado. El oficio realizado en Huesca, toma el nombre del canto Tota Pulchra es, María, antigua oración escrita presumiblemente en el siglo IV, cuyo texto procede en parte del libro de Judit y en parte del Cantar de los Cantares.

ARRAIGO Y DEVOCIÓN

Por sus valores históricos y culturales, por el profundo arraigo que tiene la ceremonia y el consenso institucional y popular que concita, el Consejo de Gobierno declaró el Tota Pulchra Bien de Interés Cultural Inmaterial y así se publicó en el BOA 29/07/2014.

En los días previos la alcaldesa de la ciudad Lorena Orduna, el deán de la Catedral, Juan Carlos Barón, y la directora del IES Ramón y Cajal, María Costa, invitaron a todos los oscenses a asistir a un acto ejemplo del legado cultural de la historia oscense junto al patrimonio de la catedral.