El Gobierno de Aragón, en manos de su vicepresidente y consejero de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial, Arturo Aliaga, firmó ayer por la mañana en el Pignatelli los nuevos contratos de concesión con las cuatro empresas gestoras de todas las estaciones ITV de Aragón. Una firma de renovación precedida por el éxito de los acuerdos anteriores y que se prorrogará durante los próximos 10 años. Aliaga calificó al acto de tener «una importancia seria».

Uno de los puntos más destacados del nuevo contrato reúne el proyecto de inversión por parte de las empresas concesionarias, por valor de 17 millones de euros y sin ningún coste para la administración, en el mantenimiento y mejora de los talleres actuales y sus equipos de inspección, y el desarrollo de nuevas estaciones en la comunidad, según informó ayer el vicepresidente del Gobierno de Aragón.

El consejero de Industria de la DGA recalcó que «la inspección de los vehículos es esencial» y que la responsabilidad de la administración era «velar por la seguridad de los vehículos en la circulación por carretera». Además, Aliaga insistió en que «el futuro pasa por una movilidad sostenible» y, aunque no se puedan controlar algunas variables viales como las personas y su comportamiento o el entorno, sí que pueden preocuparse desde la administración por el control y el mantenimiento de los vehículos y las vías por donde se circula habitualmente.

El resto de directrices marcadas en el nuevo contrato son la mejora del servicio prestado con la ampliación de horarios de atención al público, de los días de inspección y también de las plantillas de los trabajadores, se mantendrán también los cerca de 300 puestos de trabajo que generan las diferentes estaciones y se plantea un nuevo horizonte en materia de emisión de gases, en la mejora de la tecnología y en nuevas líneas de actuación en los talleres, adaptándose a los vehículos eléctricos. En referencia a la emisión de gases, Aliaga manifestó que «ha ganado mayor importancia» en la actualidad y hoy día, las ITV «son un elemento clave para controlar que los vehículos circulen por la vía pública homologados».

El nuevo plan incluye asimismo la construcción de nuevas estaciones de servicio en Sabiñánigo, Graus, Sariñena, Tarazona, Ejea de los Caballeros, Daroca, La puebla de Híjar y Albarracín con dos líneas de inspección, y una en Zaragoza con tres líneas. De esta manera, la comunidad contará con 34 estaciones ITV fijas y 9 móviles, cumpliendo así con el Plan iniciado en 1989 por el Gobierno de Aragón que pretendía que todo ciudadano tuviera una ITV a 50 kilómetros de su domicilio.

La previsión, con la prórroga de los contratos, es que los ingresos aumenten entre 2021 y 2030 hasta los 60 millones de euros, lo que significa un promedio de 6 millones de euros anuales aproximadamente.

En 2019 se realizaron 962.039 inspecciones técnicas, un 4,28% más que en el año 2018. El porcentaje de los vehículos que se rechazó fue del 22,45%, cifra ligeramente superior a la que se registró en 2018. Por un lado, los turismos de hasta 5 años tuvieron un rechazo del 16,93%, y aquellos de más de 15, del 24,43%. En Aragón, la edad media del parque automovilístico supera los 12 años de vida.