La visita de Unai Sordo a Zaragoza no ha sido tan plácida como cabría esperar. Varias decenas de delegadas de la FSS-CCOO Aragón han pedido al Secretario General, que tome medidas contra las direcciones recientemente condenadas por “vulnerar la libertad sindical” y por “conducta antisindical” contra un delegado de la FSS-CCOO Aragón y miembro de la Comisión Ejecutiva de CCOO Aragón, al que, por manifestar su discrepancia con la dirección del sindicato en Sanidad se le negó su propio crédito sindical y “se le represalió”.
Según fuentes cercanas al sindicato, las delegadas han entregado las firmas de un centenar de miembros de CCOO, más de la mitad de las delegadas electas del sindicato, junto con una petición para que “tome medidas contra las direcciones condenadas”, advirtiendo de que, “si no es así, abandonarán el sindicato”.
Asimismo, tal y como apuntan personas de la agrupación, se ha generado el rechazo entre las delegadas de la FSS-CCOO Aragón al interpretarse como “un claro acto de apoyo a las direcciones condenadas”, además de que se no les ha permitido intervenir durante la asamblea a ninguna de ellas, lo que ha originado la protesta de estas, al considerar “inadmisible” que no se les permita hablar y “expresarse en una asamblea sindical a la que habían sido convocadas”.
De este modo, una representante de estas delegadas ha manifestado que “es increíble que en una asamblea no te dejen hablar e insultante que te animen a irte de CCOO unas personas condenadas por vulnerar la libertad sindical”.
Por otro lado, las delegadas reprochaban la “actitud chulesca” del Secretario de Organización de la Federación Estatal, quien les ha reiterado “que quería que se fuesen todas de CCOO”, según explican.
