La actualidad del Real Zaragoza

Lluvia roja. El Real Zaragoza es el tercer equipo con más expulsados de Segunda

Solo Racing (10) e Ibiza (8) superan las siete rojas de un equipo aragonés con la peor marca desde la temporada 14-15

Hernández Maeso manda a la ducha a Francés en Leganés ante las protestas de Jair.

Hernández Maeso manda a la ducha a Francés en Leganés ante las protestas de Jair. / Carlos Gil-Roig

Jorge Oto

Jorge Oto

La expulsión de Zapater el pasado domingo en El Alcoraz eleva a siete las sufridas a lo largo de la temporada por un Real Zaragoza que acaba con diez efectivos sobre el campo en uno de cada 4,5 partidos. Solo Racing (10) e Ibiza (8) han sido más castigados en este sentido que una escuadra que se ha quedado en inferioridad numérica las mismas veces que Málaga y Alavés.

Las siete rojas suponen la segunda cantidad más alta de expulsiones a estas alturas de temporada desde el último descenso. Solo en la 14-15 los zaragocistas recibieron una cantidad mayor (9) pero, en todo caso, esas siete expulsiones son muchas más que la media (4,5) en estas diez temporadas consecutivas que acumulan los aragoneses en Segunda.

El Zaragoza acaba con diez efectivos sobre el campo en uno de cada 4,5 partidos

Además, se da la circunstancia de que la mayoría de esas siete expulsiones han tenido consecuencias fatales para un Zaragoza que se vino abajo tras quedarse con uno menos. En cuatro ocasiones, a la expulsión le sucedió un gol en contra casi de forma inmediata, tal y como sucedió el pasado domingo en Huesca. 

Así pasó cuando Grau enfiló el camino hacia los vestuarios en la tercera jornada. El Zaragoza empataba sin goles en Cartagena cuando el valenciano vio la segunda amarilla cuando faltaban doce minutos para el final. Y el Zaragoza acusó demasiado el golpe hasta el punto de que, tres minutos después, encajó el tanto que le abocaba a la derrota (1-0), si bien los aragoneses protestaron que De Blasis se ayudó de la mano para acomodarse el balón antes de ejecutar el disparo que batió a Cristian.

También la roja directa que vio Giuliano en Santander, en la décima jornada, fue determinante. El argentino se equivocaba al entrar con dureza sobre un rival en una zona de nadie, lo que le mandaba a la ducha justo al borde del descanso. El Zaragoza tampoco levantaría cabeza y encajaría el gol de la derrota (1-0) a veinte minutos de la conclusión merced a un cabezazo del exzaragocista Pombo.

Más errores

La tercera roja que condenó al equipo aragonés fue la mostrada a Francés en Leganés. El canterano vio dos amarillas seguidas tras cometer el penalti que permitía a los pepineros remontar. La primera por la falta en el área y la segunda por patear el punto de penalti para entorpecer el tiro de Muñoz desde los once metros. En una jugada, el Zaragoza se quedaba a remolque y en inferioridad.

La cuarta expulsión a la que le sucedió de forma inmediata un gol del adversario fue la que sufrió Zapater el domingo. El Zaragoza se había puesto por delante aprovechando la roja a Pulido, pero la rigurosa expulsión del ejeano daba alas a un Huesca que igualaría la contienda apenas diez minutos más tarde.

A la roja que vio Alarcón en Gijón (1-0) no le sucedió gol alguno, pero su error fue igual de determinante ya que el chileno se fue a la calle a los siete minutos y después del gol inicial de Queipo. El Zaragoza, además, afrontó los últimos minutos con nueve jugadores como consecuencia de la doble amarilla a Nieto a un cuarto de hora para el final.

La expulsión menos determinante fue la de Petrovic en Burgos, con el duelo ya concluido. Sus protestas le costaron la tarjeta y una sanción de tres partidos (dos por menosprecio al árbitro y otro por la quinta amarilla).