La 38ª jornada de Segunda

El golpe de gracia

El Real Zaragoza quiere firmar un triunfo decisivo ante el Burgos para dejar la permanencia en Segunda sellada en la práctica

Víctor parece decidido a mantener en La Romareda el esquema de tres centrales con Mouriño y Grau de novedades ante un rival que baja muchos enteros a domicilio

Mouriño y Maikel Mesa dialogan en el entrenamiento de este sábado.

Mouriño y Maikel Mesa dialogan en el entrenamiento de este sábado. / LAURA TRIVES

El Real Zaragoza, tras su buena cosecha en sus salidas a Huesca y Leganés, 4 puntos de 6 que han sido cruciales en la prosaica batalla por la permanencia, regresa al calor de La Romareda avistando ya de cerca la orilla de la salvación, el objetivo por el que llegó Víctor en marzo tras una temporada repleta de problemas y traumas, un curso de manual para definir lo que es una crisis casi permanente tras el ilusionante inicio. El técnico, con 9 puntos de 21 desde que arribó, aseguró en la previa que ganar este domingo al Burgos (18.30 horas) será dar un paso de gigante. Hacerlo dejaría la permanencia, tras los resultados que se han dado en esta jornada, sobre todo la derrota del Alcorcón, que marca el descenso, con 8 puntos de renta y con 12, cuatro partidos, por jugarse. La meta pues ya estaría.

Así que vencer a un Burgos que es Jekyll y Hyde, fuerte en El Plantío y flojo fuera de él, con solo 11 puntos lejos de su estadio, el segundo peor registro de la categoría, sería dar el golpe de gracia a esa permanencia, poder respirar por fin de alivio después de un año en el que casi todo lo que pudo salir mal resultó peor. Y esa saliva tragada por la tranquilidad también debería marcar el inicio de un periodo donde se esperan cambios en el proyecto, en el que Víctor llegó como salvador y con un año más firmado como entrenador. Es verdad que en el club se miran los 50 puntos y esos en ningún caso se alcanzarán en esta tarde dominical, pero con este botín el salvoconducto hacia la duodécima temporada seguida en Segunda (solo leerlo da escalofríos...), la tercera con la nueva propiedad multinacional y en la distancia que es Real Z LLC, estaría sellado de forma más que virtual.

Las bajas y el esquema 3-5-2

Eso pone en juego el Zaragoza en una tarde que se presume calurosa salvo que alguna tormenta entre en escena y en un estadio donde han sido mucho mayores las decepciones que las alegrías en este curso, con solo 25 puntos firmados en 18 partidos de local, un raquítico balance que el equipo está a tiempo, a tres partidos, de mejorar algo en este tramo final. Para ello, lo primero es vencer al Burgos de nuevo con Víctor observando aterrado la enfermería, donde se mantienen Mollejo, Lecoeuche, Nieto, Francho, Aguado, Guti, Borge y Rebollo. Muchas bajas, sin duda, lo que le llevará a completar la citación con jugadores del Aragón, con Lucas Terrer, de retorno tras el debut que le dio Velázquez, además de mantener a Cuenca, Cortés y por supuesto a Liso, ya fijo en el once.

400 aficionados del Burgos en un choque de alto riesgo

Hasta 400 seguidores del Burgos se esperan en La Romareda en un partido declarado de alto riesgo por Antiviolencia por los enfrentamientos que ha habido entre los radicales de los dos equipos, sobre todo en noviembre de 2022, entonces en los alrededores de El Plantío y antes del choque, entre Resaca Castellana, los ultras del Burgos, y Ligallo, los del Zaragoza, una pelea en donde hubo más de 60 detenidos. Mientras, el entrenador del Burgos, Bolo, dijo que tendrán que «hacer un muy buen partido para rascar algún punto» en La Romareda, donde el rival zaragocista apura sus opciones de playoff. «Son un gran equipo, un histórico, con un campo impresionante, una afición increíble y quizás no sea su mejor temporada, pero lo que querrán ahora es ganarnos para estar tranquilos. Nosotros vamos a seguir trabajando igual, pero no podemos ser una montaña rusa cada semana», aseveró, en referencia a su fortaleza de locales y sus malos números de viajero. 

La vuelta de Mouriño tras sanción y la baja de Marc Aguado con respecto a Butarque obligan a cambios en el once. Víctor ha terminado la semana manteniendo en sus ensayos el esquema de tres centrales, un 5-3-2 que tan buen resultado dio en Huesca y Leganés, aunque añadiendo más profundidad en los carriles porque el partido exige un Zaragoza más atrevido. Si se confirma esa idea, Jaume Grau entrará en la medular junto a Moya y Mouriño en el eje para sacar a Lluís López de esa plaza en el once y que los carriles los mantengan Gámez y Zedadcka, este a pie cambiado, y Azón y Liso ocupen la punta de lanza del ataque con Maikel Mesa por detrás.

Curro, la amenaza del rival

El Burgos, en un partido de alto riesgo por los radicales de ese equipo, enfrentados en anteriores ocasiones a los zaragocistas, llega a La Romareda con la vista puesta en acercarse al playoff y con Atienza como sensible baja. Recupera Bolo a Sancris y Elgezabal y no parece que vaya a optar por un esquema de tres centrales sino que mantendría un 4-2-3-1 con Curro como referencia y amenaza en la mediapunta en un Burgos veloz y muy físico. Si cambia el dibujo, entraría Grego Sierra atrás y Montiel pasaría al medio. El rival lleva 11 puntos, con 3 triunfos, en 18 salidas. Es un enemigo propicio para dar el golpe de gracia y abrazar la salvación. 

Alineaciones probables

Real Zaragoza: Edgar Badía; Fran Gámez, Mouriño, Jair, Francés, Zedadka; Jaume Grau, Toni Moya, Maikel Mesa; Adrián Liso, Iván Azón.

Burgos CF: Caro; Arroyo, Córdoba, Elgezabal, Matos; Appin, Mumo; Álex Sancris, Joni Montiel, Curro Sánchez; Fer Niño.

Árbitro: Lax Franco (Comité de Murcia).

Estadio: La Romareda.

Hora: 18:30.

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