Francés, Azón, Liso, Aguado y los 'Four Amigos' de Víctor Fernández

En 1995, tres jugadores del filial del Real Zaragoza iniciaron una aventura absolutamente exótica en el fútbol inglés. Roberto Martínez, Jesús Seba e Isidro Díaz llegaron al Wigan, donde comenzó una de esas historias bellísimas que el fútbol regala para la memoria. Los ‘Three Amigos’ pronto se convirtieron en unos ídolos en aquel pequeño club del noroeste de Inglaterra, que con el paso de los años fue creciendo y alcanzó la Premier League. Ya con Martínez como entrenador, convertido en una leyenda de la entidad, también conquistó la FA Cup en una gesta única en Wembley.

Los ‘Four Amigos’ en los que Víctor Fernández ha sujetado el crecimiento del Real Zaragoza en las últimas semanas para escapar de una zona que se ha puesto caliente también se han criado en la Ciudad Deportiva. Alejandro Francés se ha convertido en el líder absoluto del equipo, el pilar que sujeta toda la estructura desde atrás y el gran activo deportivo y económico de la SAD.

El Real Zaragoza, líder y descendido a la vez

Con Iván Azón, el entrenador tuvo reparos a su llegada y lo situó en un escalón secundario por detrás de Bakis. La lesión de Mollejo y el desesperante rendimiento del turco le abrieron la puerta del once, donde se ha quedado por derecho propio, por su incansable trabajo y por goles (al Tenerife y al Elche). Adrián Liso ha sido la gran apuesta de Fernández. Lo subió desde el juvenil y siempre ha contado con él. En las dos últimas semanas, las decisivas, como titular. El tanto del extremo al Huesca es el que provoca un giro de guion en esta corta etapa con Víctor. Ha aportado velocidad, descaro, carreras e ímpetu.

Ha habido un cuarto, Aguado, que también ha dado un paso adelante con el nuevo entrenador. Marc empezó a sentirse más cómodo, tocando más balón y dio solidez al medio junto a Moya, también muy mejorado. Cada vez estaba más cerca de su mejor versión. Desafortunadamente, cayó lesionado en Leganés y estará fuera prácticamente lo que queda de Liga.

Después de probar con una idea a su vuelta, y obtener pocos resultados, Víctor Fernández ha ido moldeando su propuesta futbolística con el paso de las semanas, cambiando algunas piezas. El equipo ha ganado competitividad colectiva en las dos últimas jornadas con la base de tres centrales, pero los que han ido sacando las castañas del fuego, además del veneno de Maikel Mesa de cara al gol, son estos cuatro amigos de la Ciudad Deportiva.