Los michelines son es uno de los principales enemigos de quienes buscan ponerse en forma. Y también uno de los retos aparentemente más difíciles de superar dada la tendencia del cuerpo a almacenar grasa extra a los lados de la cintura. También llamados lorzas, chichas o agarraderas del amor ('love handles' en inglés), suelen ser motivo de frustación en el arduo camino hacia ese cuerpo ideal.
Hacer ejercicio a diario es fundamental si se quiere combatir el exceso de grasa o perder peso. Sin embargo, la zona de la cintura a menudo se resiste a los cambios. Basta con descuidarse un tiempo para que el cuerpo diez que se había logrado vuelva al punto de partida.
Esta lucha interminable suele causar frustración, desánimo y afectar seriamente a la autoestima, sin olvidar que las mal llamadas lorzas también pueden generar serios problemas de salud.
Cuál es el origen de los michelines y cómo se combaten
El motivo por el que se acumula grasa extra en la cintura es muy simple. Se basa en el gasto energético, la relación entre lo que se come y lo que se quema. Si el cuerpo asimila más energía de la que necesita, guarda la sobrante como mecanismo de superviviencia en zonas concretas del cuerpo. Por si hace falta más adelante.
Por ello, además de una rutina de ejercicio, la clave para eliminar los michelines es cuidar la alimentación. ¿Cómo? Pues comiendo menos, de forma más saludable, y gastando más energía.
Una dieta sana y variada
La dieta debe ser rica en proteínas para nutrir adecuadamente a los músculos. Se recomienda incluir en nuestras comidas los huevos, el pescado azul, las verduras y otras grasas buenas como el aguacate (tan de moda ahora) o el salmón.
Los alimentos ultraprocesados (como la bollería industrial), el alcohol o los refrescos son por contra aliados de los michelines. Y tampoco conviene tomarlos en exceso aunque no se tenga como objetivo perder peso o eliminar grasa. La mala alimentación también se traduce en problemas de salud que, en muchas ocasiones, no son visibles.
En lo que respecta al gimnasio, se recoimenda combinar el cardio (correr, nadar o caminar), con la musculación. Esto es muy importante ya que los músculos tienen una importante función metabólica. A más masa muscular, más calorías se queman.
