La dibujante de cómics e ilustradora de Barbastro forma parte de la exposición ¡Boom! El cómic aragonés en el mercado americano en el Centro de Historias y ganó un premio en el último Salón del Cómic de Zaragoza.

—¿Cómo acaba una dibujante de Barbastro trabajando para la industria del cómic?

—Imagino que como cualquiera que tenga una afición y siga desarrollándola...

—¿Tenía claro que se iba a dedicar al cómic?

—Bueno, estaba bastante abierta y siempre lo he estado. Lo que más me gusta es el cómic pero si me sale otra opción de película animada, storyboard o de ilustradora también me está bien.

—¿Cómo se introduce en el cómic?

—No leía mucho de pequeña porque a Barbastro antes no llegaba mucha cosa más allá de los Asterix y Mortadelos típicos. Es a raíz de ver por la tele dibujos animados y, sobre todo, al llegar a Barcelona empecé a leer cómics mas diferentes, comic francés, manga, americano, de superhéroes y ahí ya dije ‘esto me gusta mucho y me quiero dedicar a esto’.

—¿Cuál es el tipo de cómic que más le gusta?

—Disfruto todo pero los que más suelo disfrutar son con lo que se llama ahora novela gráfica, cosas como Laura Dean me ha vuelto a dejar o Carne de cañón. Casi cualquier cosa que saque La cúpula me gusta mogollón.

—Ahora está enfrascada en una novela gráfica...

—Sí, estoy trabajando en una para Estados Unidos pero no puedo contar mucho solo que será más bien juvenil.

—¿Es metódica a la hora de trabajar?

—Depende mucho del proyecto. Si es una cosa mía, es decir, algo que tanto el guion como el dibujo son míos, no hago guion hasta que no está todo el cómic dibujado. Sí que me hago un guion de primero pasa esto y luego esto otro pero no es un guion metódico. Empiezo directamente a dibujar y me voy imaginando los diálogos y cuando está ya todo dibujado los voy encajando. No está todo definido del guion hasta el último momento. Pero si me dan el guion muy definido es otra cosa, hay que tener un método más militar.

—Con su fanzine Us

—Visibilizar mi situación personal de estos años. Mi pareja es transgénero y me di cuenta que la gente estaba muy desinformada y pensé que había que contribuir a visibilizar la situación.

—Y participa también en ¡Boom!

—Estar en la exposición con gente como Javi Pina, David López y Fernando Blanco que llevan tantos años en la industria nortemaericana es muy guay porque yo aún estoy metiendo el pie, he hecho un par de cosas para América pero ellos llevan un montón de trayectoria.

—¿Cómo es la situación de la mujer en el cómic?

—Somos menos, no creo que sea por nada más que por como está la educación. A una mujer no les sueles dar un cómic de Spiderman, le das una Barbie. Ahora mismo está habiendo un despertar de mujeres porque la educación es cada vez más igualitaria.