Esteban Navarro acostumbra a ponerle título a sus libros justamente cuando comienza a escribirlos. En el caso de La casa de enfrente mantuvo "el nombre inicial de la obra", dice. Este nuevo trabajo es una novela negra, policiaca, que comenzó a escribir hace ya doce años y que el 14 de noviembre vio la luz en su primera edición en papel. Pero no fue envuelta en las tapas de un libro cuando se dio a conocer, pues primero se lanzó en formato para ebook, concretamente para Kindle, y se puso a la venta por 0,94 céntimos de euro. En dos semanas se colocó en las listas de los 10 más vendidos en España de Amazon, y no solo eso, pues también consiguió colarse en el número uno de los libros de misterio en Estados Unidos.

Además, La casa de enfrente aún sigue en las listas de más vendidos de muchas plataformas digitales. Pero, un día, llamó a su puerta Ediciones B, que fue una gran sorpresa para Navarro pues tardó un poco en creérselo. Muchas editoriales habían rechazado la novela: "Me llamaron tres veces, ¡pensaba que era una broma". Así, lanzó la novela en formato de bolsillo, por un precio inferior a diez euros.

LA ENVIDIA QUE SE ESCONDE Navarro opina que "la envidia saca lo peor de nosotros", y no solo eso si no que "de los siete pecados capitales, nadie lo reconoce". El libro tiene mucho que contar sobre este sentimiento porque la trama gira en torno al asesinato de la joven Sandra López, de 16 años. El problema es que uno de los habitantes del pueblo imaginario de Roquesas de Mar, Álvaro Alsina, es el foco sobre el que se descargarán las sospechas de este crimen, debido a esta cuestión.

La novela tiene "todos los ingredientes del género negro", como explicó en la presentación Navarro. En ella desfilan, amén de muchos personajes, "el sexo, el amor, un nazi refugiado, las intrigas vecinales, el misterio...". Además su título nace de una metáfora porque, para Esteban Navarro, las casas se identifican con nuestras vidas.