La DGA podría asumir el acondicionamiento del Parking Norte

Los plazos están tan ajustados que en el Ayuntamiento de Zaragoza se analizan hasta los punto y coma del aún incipiente proyecto de la ‘Pequeña Romareda’, el campo portátil que se va a instalar en el Parking Norte de la Expo para que el Real Zaragoza pueda jugar un par de temporadas mientras se construye el campo nuevo. Natalia Chueca quiere que todo esté bien atado, ya que teme que un recurso en los juzgados de procedencia ahora imprevisible -incluso un particular podría presentarlo- haga saltar por los aires todos los cálculos, entre los que prevalece que la capital aragonesa sea sede del Mundial 2030 gracias a su flamante nuevo campo de fútbol. 

Cabe recordar que ya en septiembre de 2023, el club renunció a concurrir en el concurso abierto por el consistorio para construir el nuevo campo por razones de “inseguridad jurídica”, ya que el grupo municipal de Podemos había presentado un recurso ante el Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón.

Un estadio portátil en el Parking Norte de la Expo, posible 'plan b' para el Real Zaragoza

El exceso de celo por no dejar ni un cabo suelto ha empujado a la alcaldesa a ser protagonista de una acelerada gestión de este asunto. Desde que el 21 de marzo EL PERIÓDICO DE ARAGÓN adelantara que el Parking Norte entraba en todas las quinielas, todas los implicados han pasado por una 'prueba de estrés' ante la opinión pública en la que casi nadie ha aprobado, y en el que nadie ha salido demasiado bien parado, empezando por quien preside la sociedad constituida a partes iguales (ayuntamiento, Gobierno de Aragón y club). El desgaste de Natalia Chueca ha sido importante. Así, no extraña que en pleno revuelo se haya puesto en marcha el proceso de selección de un supergerente con (casi) plenos poderes, como también avanzó este diario. 

Un supergerente de 80 mil euros al año para la nueva Romareda

Cambio de planes

Nada ha pasado aún, ni un ladrillo se ha movido -las obras comenzarán en julio- y sin embargo los planes se han cambiado sobre la marcha. Hace 15 días oficialmente estaba vigente el 'plan a' (utilizar el campo en paralelo a la ejecución de las obras), pero ahora el que manda es el 'plan b' (mudarse a una instalación portátil para ganar tiempo). Y todo ello sin justificación alguna que explique por qué no se dijo la verdad desde el minuto uno. 

Alguna de las claves clave se esconde en la necesidad de ganar tiempo tirando balones fuera mientras se diseñaba el entramado jurídico-administrativo que necesita la 'Pequeña Romareda'. Se busca la fórmula idónea en la que todo encaje.

Tres gradas de La Romareda podrán demolerse a la vez para ganar tiempo

Suelos propiedad del Gobierno

Los suelos del Parking Norte son propiedad del Gobierno de Aragón, que tiene el 33% de las acciones de La Nueva Romareda SL. Ahora mismo la opción de mayor peso es que sea la propia DGA y no el ayuntamiento la que acondicione el solar -abastecimiento, vertidos, iluminación…- para después cederlo a la sociedad mixta para que sea esta la que instale el campo portátil. Las condiciones de esta cesión, que podría ser temporal, son las que ahora mismo se estudian a conciencia.

De trasfondo aparece la promesa electoral de la alcaldesa, que en campaña se comprometió a sacar adelante la Ciudad Inteligente del Deporte, un proyecto de difícil encaje para las cuentas municipales pero que ha cogido fuerza en las últimas semanas, aunque de rebote. Así, los modelos administrativos que se manejan son varios y complejos. Primero hay que dar respaldo a la instalación portátil para que juegue el Zaragoza durante dos años y después plantearse la Ciudad del Deporte. Lo primero serviría de primera piedra de lo segundo, como pretende la alcaldesa Chueca. De momento, lo más probable es que la DGA ceda el Parking Norte pero ya urbanizado para que sea instalada la ‘Pequeña Romareda’.